El diputado socialista recuerda que el acuerdo firmado entre el Gobierno regional, el PSOE y Ciudadanos incluye 640 millones de euros para blindar las infraestructuras sanitarias esta legislatura.

Califica de “bochornoso” que el PP demande inversiones en materia sanitaria cuando son “los mismos que paralizaron las obras de los hospitales de la región” y “los mismos que cerraron consultorios médicos”.

El diputado socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha Pablo Camacho ha instado hoy al PP de Paco Núñez a unirse al pacto por la reconstrucción económica y social de la región ante la COVID-19 si “de verdad” quiere asegurar la inversión sanitaria y “defender la sanidad pública”.

“Que abandonen el insulto y la bronca y se sumen al pacto por la reconstrucción de Castilla-La Mancha, que contempla 640 millones de euros para infraestructuras sanitarias durante los próximos tres años”, ha afirmado Camacho.

Ha valorado este acuerdo entre el Gobierno regional, el PSOE y Ciudadanos y ha invitado al PP a que “rectifique” porque “no es de recibo hacer política a costa de los problemas de los ciudadanos” y, según ha asegurado, “están a tiempo de ser útiles a los castellanomanchegos”.

“Resulta verdaderamente bochornoso escuchar a los dirigentes del PP de Castilla-La Mancha demandar inversiones en sanidad, los mismos que paralizaron las obras de los hospitales de la región, los mismos que cerraron consultorios médicos”, ha considerado.

Y ha añadido que son “los mismos que destinaron cero euros en adquisición de alta tecnología para los centros sanitarios del Sescam” y que “no pueden, ahora, en un ejercicio de desmemoria, solicitar lo contrario de lo que hizo Cospedal y de lo que entonces Paco Núñez aplaudía”.

Del mismo modo, ha considerado “contradictorio” que el Partido Popular “solicite inversiones sanitarias con una mano cuando en Europa, con la otra mano, lo que hacen es condicionar la llegada de fondos a España a cambio de realizar recortes”.

Con ello, ha subrayado “alto y claro, una vez más”, que esta crisis -al contrario que la del año 2011- “no la van a pagar los más débiles, vamos a hacer política para que nadie se quede atrás, para recuperar social y económicamente nuestra tierra”.