"No se puede hablar de recuperación si no conseguimos que llegue a todos los ciudadanos de una manera justa y sostenible"
"No se puede hablar de recuperación si no conseguimos que llegue a todos los ciudadanos de una manera justa y sostenible"
"No se puede hablar de recuperación si no conseguimos que llegue a todos los ciudadanos de una manera justa y sostenible"
Sergio Gutiérrez, Secretario General de los Socialistas Españoles en el Parlamento Europeo, ha denunciado "la falta de medidas reales para hacer frente a la precariedad y el aumento de las desigualdades".
Tras conocer los datos publicados por la Comisión Europea en El estado anual sobre la evolución social y del empleo en Europa 2017, que demuestran una vez más que la recuperación es profundamente desigual, Sergio Gutiérrez, Secretario General de los Socialistas Españoles en el Parlamento Europeo, ha denunciado “la falta de medidas reales para hacer frente a la precariedad y el aumento de las desigualdades”.
La Comisión confirmó ayer las tendencias positivas del crecimiento en la UE, pero también las propias trampas de la recuperación: la devaluación salarial y el aumento del trabajo precario en Europa (trabajo a tiempo parcial involuntario, falsos autónomos y contratos a la carta como los contratos de cero horas) están teniendo efectos devastadores no sólo en la vida de esos trabajadores sino también en las arcas del Estado, poniendo en riesgo la sostenibilidad de los sistemas de protección social. Para Gutiérrez “estas divergencias laborales y sociales dentro y entre Estados miembros se están acentuando desde el inicio de la crisis, regando el germen del populismo que está destrozando Europa: el empeoramiento de las condiciones laborales y la quiebra del empleo como motor del ascensor social”.
En el caso de nuestro país, los datos son demoledores. "Se vende a España como el alumno modelo de la recuperación europea, con tasas de crecimiento del 3%; pero la otra cara de la moneda es desoladora: las tasas de desempleo siguen rondando el 20% y el empleo que se crea es principalmente parcial a tiempo involuntario (en torno al 60%) y seguimos liderando en subempleo y desempleo juvenil. Además, la población en riesgo de pobreza y exclusión social sigue al alza, con un 22,3%, y en España, uno de cada 3 niños vive en riesgo de pobreza y exclusion social", ha denunciado.
El grupo socialista lleva años reclamando un modelo de recuperación diferente, “no podemos quedarnos en el debate a corto plazo, en las perspectivas económicas más inmediatas, sino que hoy más que nunca debemos redefinir el proyecto europeo para centrarlo en la ciudadanía. No me cansaré de repetirlo, la UE tiene que dar un giro socio-económico de gran calado y volver al centro del proyecto europeo: la Europa Social”
Los Socialistas españoles presentaron antes de la Cumbre de Roma una serie de medidas sociales para garantizar que la recuperación sea sostenible en el tiempo y justa. Entre ellas, Gutiérrez ha destacado:
• Garantizar un salario decente a todos los trabajadores que les permita llegar a fin de mes cubriendo no sólo sus necesidades más básicas sino vivir con dignidad a ellos y sus familias. Para ello necesitamos un Marco Europeo de salarios mínimos, en el entorno del 60% del salario medio de cada Estado miembro, para acabar con la carrera salarial a la baja entre los países.
• Una fiscalidad más justa para las rentas medias y trabajadoras. En mi país, por ejemplo, la brecha entre los salarios más altos, que han ganado un 16% de poder adquisitivo desde el 2006, y los más bajos, que lo han visto disminuido en un 23% . Necesitamos fiscalizar también las rentas del capital para redistribuir mejor la riqueza y combatir la pobreza.
• Un Marco Europeo de rentas mínimas para sacar de la pobreza a los 120 millones de personas que siguen en esa situación que cuente con medidas de apoyo específicas para los Estados que más lo necesitan.
“El futuro nos va a juzgar no por el calendario de ajuste del déficit o el plan de inversiones, sino por ser la generación capaz de redefinir el pacto social recuperando la calidad del empleo y la dignidad de su remuneración como la piedra angular de un modelo capaz de reducir la desigualdad al tiempo que se adapta a las necesidades del S.XXI. O, por el contrario, por ser la generación que quebró el sueño europeo de un modelo de igualdad, justicia social y dignidad y que nos había convertido en la envidia del resto del mundo”, ha concluído Gutiérrez.