Los primeros 400 puntos del programa electoral de Cospedal tendrían que ser para pedir perdón por los destrozos realizados

El candidato del PSOE a la Presidencia de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, aseguraba hoy en Talavera de la Reina (Toledo) que “esta tierra no necesita un cambio histórico, ese ya lo hicimos nosotros, sino ir todos a una el día 24 a cambiarla”.

Emiliano García-Page resaltaba que “tiene el honor de haber formado parte de los gobiernos socialistas que protagonizaron el gran cambio de Castilla-La Mancha”, una tierra olvidada a la que dieron dignidad y orgullo, junto a hospitales, colegios, universidad, centros de salud, infraestructuras…

Y ahora, el próximo domingo nos jugamos mucho, y pedía una reflexión sosegada porque lo que está en juego es quien va a ser presidente del Gobierno regional, el alcalde de un ayuntamiento, todo lo que afecta a la vida cotidiana de los ciudadanos y no podemos permitir que Cospedal remate todo lo que no ha matado en los cuatro años anteriores.

En el acto de cierre de la intensa jornada electoral de hoy, García-Page aseguraba que para “cambiar a Cospedal sólo hay un camino ir a votar porque si no se remata en el clavo se machaca el dedo y por eso pido un voto útil para que Cospedal no siga”.

Criticaba de nuevo el candidato socialista que Cospedal siga sin presentar su programa electoral y que anuncie que lo va hacer el último día de campaña y porque se está viendo obligada. Algo que es una auténtica falta de respecto, según García-Page quien aseguró que los 400 primeros puntos del programa de Cospedel deberían ser pedir perdón por haber destrozado la sanidad, la educación y los servicios sociales.

Los aplausos de los más de 700 asistentes al acto acompañaron con intensidad la intervención de Emiliano García-Page y también reconocieron los mensajes de futuro, ilusión y cambio que trasladaron los socialistas que intervinieron que fueron el secretario general del PSOE de la provincia de Toledo, Álvaro Gutiérrez; la número dos de la candidatura del PSOE a las Cortes por la provincia de Toledo y talaverana Agustina García-Élez; y el secretario general de los socialistas de Talavera de la Reina, José Gutiérrez.

Ante todos ellos y en la ciudad con la mayor tasa de paro de las que tienen más de 50.000 habitantes, el candidato del PSOE a la Presidencia regional insistió en su compromiso con el empleo, porque su primera preocupación es el paro, y se comprometió a que Talavera tendrá un plan de empleo especial igual que para otras zonas de Castilla-La Mancha que comparten con ella tener paro por encima de la media.

Además, García-Page se comprometió a hablar y a discutir con quien tenga que hacerlo, con el Gobierno de España o con la derecha portuguesa para que el AVE llegue a Talavera, “porque si hay algo peor que no hacerlo es dejarlo a medias y vamos a acabar esa obra”.

Recordaba que la última vez que visitó el teatro Palenque lo hizo el Día de la Región y confesó que sintió vergüenza ajena de ver que las calles estaban cortadas y que uno de los 151 policías que tuvieron que venir de Madrid a proteger a Cospedal le pidiera identificarse.

Cuando sea presidente, aseguró, que aspira a “venir a aquí como lo hago ahora, y como llevo mucho tiempo haciéndolo, paseando por la calle, recibiendo el cariño que estoy recibiendo estos días y que la gente me llame por mi nombre”.

García-Page dijo que “los próximos cuatro años quiero devolver la moral y la autoestima a esta tierra a la que se la han intentado quitar gente que no la tiene”.

En una intervención cargada de gestos y complicidad, el candidato socialista anunció que el acto de cierre de la campaña electoral, el próximo viernes, lo celebrará en Salobre, el pueblo del ex presidente de Castilla-La Mancha, José Bono.