Las nuevas normas de explotación aseguran los trasvases de agua y solo dejan el sobrante para el Tajo
Las nuevas normas de explotación aseguran los trasvases de agua y solo dejan el sobrante para el Tajo
Las nuevas normas de explotación aseguran los trasvases de agua y solo dejan el sobrante para el Tajo
El secretario regional del Agua del PSOE y presidente de los Ribereños lamenta que Cospedal tolere el “colonialismo hidrológico”
Las nuevas normas de explotación del trasvase Tajo-Segura, aprobadas esta semana en el Consejo Nacional del Agua, dejan como gran perdedora a Castilla-La Mancha y especialmente a la cabecera del Tajo. “Lo que se ha hecho es asegurar el agua a los regantes del Levante, y lo que sobre se deja correr por el río. Esto es absurdo, además de que contradice de plano la Directiva Marco del Agua de la Unión Europea, que da prioridad a la cuenca cedente y solo permite trasvasar cuando hay excedentes”, ha asegurado el secretario de Agua de la Ejecutiva regional del PSOE y presidente de la Asociación de Municipios Ribereños de Entrepeñas y Buendía, Antonio Luengo.
En efecto, los acuerdos establecen claramente las cantidades que se podrán trasvasar cada año, en función de la situación de los embalses de Entrepeñas y Buendía. De este modo, tanto la reserva hídrica en la cabecera como los caudales ecológicos fijados para la cuenca del Tajo quedan subordinados al trasvase y se incumplirán de manera sistemática, a la vista de la media anual de aportaciones que recibe el río.
“Con estas reglas de explotación, lo único seguro es que los regantes saben el agua que les va a llegar”, ha afirmado Luengo. De hecho, ha subrayado que la mejor pista sobre el verdadero resultado de estos acuerdos “es oír cómo el consejero de Agricultura de Murcia dice que se han aprobado todas las demandas que se habían hecho desde su región, y de acuerdo con las peticiones de los regantes”.
Colonialismo hidrológico
“Es imposible que la cuenca del Tajo se pueda desarrollar con estas reglas de explotación. Se han cargado la cuenca del río entera. Y eso que han hecho, mientras que Cospedal está pendiente de sus juicios con Bárcenas, se llama colonialismo hidrológico. Están dispuestos a cargarse esta región y lo que más duele es que quiera hacerlo la propia presidenta y no le interesen los ciudadanos de Castilla-La Mancha”, ha asegurado el responsable socialista.
En cuanto al plan hidrológico del Júcar, ha señalado que se merma la disponibilidad de agua en las provincias de Albacete y Cuenca “para que vaya a regar a Valencia”. Incluso el abastecimiento de la ciudad de Albacete está supeditado al uso prioritario para riego en la Comunidad Valenciana. “Por tanto, Albacete se puede quedar sin agua o costarle tremendamente cara cuando haya escasez”, ha advertido Luengo.