“En estos 24 meses, el PIB regional ha caído un 5 por ciento, hemos perdido 2.000 empresas y el paro ha subido un 5 por ciento”

“Lo peor es que tenemos ya a 90.000 familias con todos sus miembros en paro, 12.000 más que antes de la reforma laboral”

La portavoz de Empleo del PSOE en las Cortes de Castila-La Mancha, Milagros Tolón, ha hecho hoy balance de los dos años transcurridos desde la puesta en marcha de la reforma laboral del Gobierno, cumplidos esta misma semana. A su juicio, los datos en Castilla-La Mancha son aún peores que los del resto de España, dado que, tras este tiempo, “en nuestra región hay más paro, más empleo destruido, menos afiliados a la Seguridad Social, más trabajadores asalariados afectados por expedientes de regulación de empleo (ERES), menos empresas y el Producto Interior Bruto ha acumulado una caída que rondará el 5 por ciento”.

Tolón lamentaba que, después de 24 meses “se han cumplido todas las previsiones de quienes decíamos que esta reforma de Rajoy y Cospedal no iba servir para crear empleo, sino que tenía como únicos objetivos abaratar el despido, rebajar los salarios y dejar a los trabajadores en la situación de mayor desventaja de fuerzas respecto de los empresarios de la historia de la democracia”.

Milagros Tolón lo resumía de la siguiente manera:”El paro ha crecido un 5 por ciento, que es el mismo porcentaje en el que ha caído el PIB de nuestra región en 2012 y 2013. Pero es que, además, tenemos 2.000 empresas menos inscritas en la Seguridad Social”.

Si malos es este escenario, peor aún es observar cómo, “el número de trabajadores afiliados a la Seguridad Social se ha desplomado un 8 por ciento, con casi 50.000 menos. Además, hemos perdido población activa y ocupada. Es decir, que trabaja menos gente y hay menos gente en edad de trabajar en Castilla-La Mancha no solo por al aumento del paro, sino por la emigración, tal y como ponía de manifiesto esta semana Comisiones Obreras, cuando cifraba en 18.000 las personas que habían emigrado de Castilla-La Mancha el año pasado en busca de empleo”.

Además, la situación de los parados de larga duración no ha mejorado con el Gobierno del PP, sino todo lo contrario. “Desde la entrada en vigor de la reforma laboral, las familias con todos sus miembros en paro han pasado en Castilla-La Mancha de 77.500 a 89.100, y cerca de 125.000 desempleados ya no perciben ningún tipo de prestación o subsidio”, aclaraba Tolón, quien señalaba como la consecuencia más evidente e inmediata de esta dramática situación que “el índice de pobreza en la región ha crecido exponencialmente hasta afectar ya a más del 33 por ciento de las familias castellano-manchegas. Es decir, que una de cada 3 familias en nuestra región están en riesgo de exclusión social”.