Desde el PSOE piden a la consejera de Agricultura que se siente con los sindicatos de la empresa pública de gestión ambiental Geacam para buscar una salida negociada a los graves problemas y al “trato inhumano” al que están siendo sometidos los trabajadores

Rechaza “la actitud altamente irresponsable del Gobierno de Castilla-La Mancha al lanzar de manera escandalosa a los voceros del Partido Popular a increpar y a insultar a los sindicatos en una campaña injusta e inmerecida”

La diputada regional del PSOE, Blanca Fernández, ha pedido a la consejera de Agricultura de Castilla-La Mancha, María Luisa Soriano, que se siente con los sindicatos de la empresa pública de gestión ambiental Geacam para buscar una salida negociada a los graves problemas y al “trato inhumano” al que están siendo sometidos los trabajadores.

Fernández ha apelado a la “sensatez” y a la “moderación” por parte del Gobierno regional para solucionar una situación de “máxima tensión” creada a raíz de que la consejera de Agricultura anunciara el despido de 700 bomberos forestales y que se suman a los 600 profesionales que también se fueron a la calle tras ser despedidos y no renovados.

La responsable socialista ha defendido en todo momento la lealtad de los trabajadores del Geacam, de ahí que haya manifestado que los artífices de apagar los fuegos de los montes en la región jugándose incluso su vida “no merecen estar en una situación de ansiedad, de no saber qué va a pasar mañana y de sentir cómo su empresa no les marca ninguna dirección porque parece que el fin de la misma esté cerca”.

Ese es precisamente el objetivo que según Fernández persigue el Gobierno que preside Dolores de Cospedal, romper el preacuerdo con los representantes de los trabajadores suscrito el pasado 26 de septiembre, mediante el cual los efectivos del Geacam pasarían de fijos a fijos discontinuos y con un contrato de 8 meses al año en lugar de los 12 que tenían con anterioridad.

Fernández recuerda que tras varios meses de arduas negociaciones, justo el día en el que la consejera Soriano debía ratificar el acuerdo dejó plantados a los sindicatos en “una clara estrategia de ruptura clara e intencionada”. Y es en esa línea en la que la también portavoz de Agricultura del Grupo Parlamentario Socialista ha enmarcado “la actitud altamente irresponsable del Gobierno de Castilla-La Mancha al lanzar de manera escandalosa a los voceros del Partido Popular a increpar y a insultar a los sindicatos en una campaña injusta e inmerecida”, entre ellos el senador y presidente provincial del PP, Carlos Cotillas, y el portavoz de los ‘populares’ en la Diputación de Ciudad Real, David Marín.

La diputada regional del PSOE ha apuntado que si el Gobierno de Cospedal quisiera solucionar este problema tan sólo tendría que sentarse con los representantes de los trabajadores para plasmar por escrito el acuerdo al que ya habían llegado, pero “ha quedado meridianamente claro que la intención de negociar ha sido ninguna”.

Esta estrategia de ataque y desprestigio hacia los profesionales del Geacam ha sido calificada de “insólita” por Blanca Fernández, hasta el punto de “la consejera Soriano se ha atrevido a lanzar una ofensiva por tierra, mar y aire contra los trabajadores en lugar de hablar y acordar, demostrando con ello que no dice la verdad y que cuando tiene un interés partidista no le duelen prendas en lanzar todo tipo de injurias y de calumnias o de faltar de verdad”.

La mentira de ‘El Chaparrillo’

Por último, y como ejemplo de esa estrategia de mentiras y falsedades, la parlamentaria socialista ha citado el argumento que han utilizado tanto desde el Ejecutivo regional como desde el Partido Popular para cerrar el laboratorio pecuario de El Chaparrillo y trasladarlo a Talavera. Fernández ha dicho que “es tal la desfachatez y el descaro de las mentiras que hemos llegado a escuchar que Talavera de la Reina posee el 80% de la cabaña ganadera”, unas declaraciones totalmente falsas que Fernández se ha encargado de demostrar con las cifras oficiales, que dicen que solamente la comarca de Almodóvar aglutina 253.171 cabezas de ganado, es decir, mucho más del doble de las existentes en Talavera, o cómo en la provincia de Ciudad Real hay en total más de un millón de reses mientras que en la provincia de Toledo la cifra apenas supera las 640.000.