El presidente regional desmiente rotundamente las acusaciones del PP y señala que hay muchas comunidades autónomas que están peor que la nuestra , “sin embargo, somos nosotros la portada por las barbaridades de los dirigentes del PP

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha desmentido rotundamente las acusaciones que están lanzando los dirigentes del PP sobre las finanzas públicas de la Región. Barreda ha sido tajante y ha señalado que “todas esas mentiras de hoy son los recortes de mañana”.

En una entrevista en el programa “Hoy por Hoy” de la Cadena Ser, Barreda ha lamentado la actitud “irresponsable, demagógica y sin rigor” de estos dirigentes del PP que con sus “mentiras tan gordas”, en su opinión, están creando “zozobra e incertidumbre” y están haciendo daño no sólo a Castilla-La Mancha sino al resto de España, a los empresarios y a la economía en general.

Barreda dejó claro que no hay nada oculto en las cuentas de Castilla-La Mancha. Y recordó que, ayer mismo, la consejera de Economía y Hacienda dio datos exhaustivos de la cuenta general de la Junta de 2010, datos que han sido presentados ante las Cortes de Castilla-La Mancha y que también se pueden consultar por cualquier ciudadano en la página web de la Junta de Comunidades.

“Somos la única comunidad autónoma que ha presentado esta cuenta, por lo tanto no cabe más claridad y transparencia”, indicó Barreda.

También señaló que las cuentas de un presupuesto de más de 9.000 millones de euros son complicadas “pero son claras y decimos la verdad sobre la deuda y el déficit. Hemos hecho un desnudo integral en este sentido”, sentenció.

El presidente regional indicó que la situación es muy cambiante y dinámica e informó que cada día en Castilla-La Mancha se pagan 29 millones de euros a aproximadamente 8.000 proveedores.

“Es cierto que nosotros debemos dinero pero a Castilla-La Mancha también la deben dinero. Y puso como ejemplo que el Gobierno de España nos adeuda en estos momentos alrededor de 250 millones de euros que obligadamente nos tiene que transferir, esperemos que sea cuanto antes”, argumentó.

En referencia a las acusaciones de que su Gobierno ha intentado destruir facturas, el presidente de la Junta reclamó al PP que “no lance la piedra y esconda la mano” y que “no digan barbaridades e imputen delitos como si no pasara nada”. “Saben que eso es imposible porque en la administración las facturas se registran”, sentenció.

También dejó claro que las nóminas de los empleados públicos se pueden pagar sin ningún tipo de dificultad y el PP lo sabe.

Proceso “inquisitorial”

Barreda indicó que en Castilla-La Mancha estamos viviendo un proceso “inquisitorial” por parte de los dirigentes del PP, que acusan de cometer delitos, sin aportar pruebas, y pretenden que los acusados sean los que tengan que defender su inocencia.

Barreda señaló que el PP “se está curando en salud” y está utilizando la estrategia de poner todo muy negro antes de hacerse cargo del Gobierno, para “si las cosas salen razonablemente bien, decir que es mérito suyo y si salen mal, echar la culpa al gobierno saliente”, aseveró.

“Esto es poco serio y riguroso e inaceptable. Ahora les toca a ellos gobernar en un momento difícil, en parecidas circunstancias a las que nosotros hemos tenido que gobernar en los dos últimos años”, indicó el presidente regional.
Para Barreda, Castilla-La Mancha tiene dificultades económicas, pero como el resto de regiones, “y hay muchas que, desde el punto de vista financiero, están infinitamente peor que nosotros”, aseguró.

Lo que ocurre, argumentó el presidente del Ejecutivo regional, es que Castilla-La Mancha, “está siendo la portada y la noticia en los medios de comunicación por las barbaridades que están diciendo los dirigentes del PP, que lamentablemente, lo están haciendo con la autorización y con el empujón de Cospedal y de Rajoy, porque si no les deberían haber desautorizado claramente”.

Por otra parte, señaló que ha escrito una carta a la presidenta regional del PP para, si así lo estima oportuno, mantener reuniones directas entre ambos, “con el fin de contestar a todas sus dudas y preocupaciones”. Aunque se mostró escéptico sobre que puedan llegar a producirse, porque los antecedentes no son buenos.

Así, recordó que la dirigente del PP, durante cuatro años no ha querido reunirse con él, ni debatir con él en las Cortes o en la campaña electoral.

Barreda indicó que como presidente en funciones de la Región está obligado a mantener una posición de equilibrio y de tranquilidad, “por eso no quiero colaborar a la espiral de violencia verbal y de acusaciones que se ha generado”.

Aseguró que De Cospedal la semana que viene será la nueva presidenta de Castilla-La Mancha y debería ser la primera interesada en que no hubiera este clima de confusión y de enfrentamiento frontal.

Por último, recalcó que haber ganado por un escaño las pasadas elecciones autonómicas no les da derecho a los dirigentes del PP a tener el comportamiento que están manteniendo. “De Cospedal no supo perder hace cuatro años, cuando, en el discurso de investidura tuvo un comportamiento muy duro y de no aceptación de su derrota, y lamentablemente ahora tampoco sabe ganar”, concluyó.