La diputada regional Matilde Valentín ha destacado que el presidente Barreda ha querido que ese ajuste se produzca sobre el gasto corriente y haciendo que paguen más los que más tienen

La diputada regional, Matilde Valentín, ha señalado respecto al Plan de Consolidación de Finanzas y Servicios Públicos de Castilla-La Mancha, aprobado ayer por el Consejo de Gobierno, cuyo objetivo es ahorrar un millón de euros, que es un plan imaginativo para mejorar nuestros ingresos y para reducir el gasto, que en ningún caso afectará a los servicios esenciales como sanidad, educación o servicios sociales, ni tampoco a los empleados públicos para que no tengan que soportar más sacrificios de los que ya han hecho.

Matilde Valentín explicó que todas las comunidades se están apretando el cinturón como consecuencia de la crisis y en eso no hay diferencias. Las diferencia radica -subráyó- en el modelo elegido para poner en marcha las medidas de ahorro.

En este sentido, explicó que en Castilla-La Mancha hemos optado por no cargar estos ajustes sobre las familias ni sobre las pequeñas y medianas empresas. Hemos optado por mantener la calidad de nuestros servicios educativos, sanitarios o de bienestar social. El presidente Barreda ha decidido que no afecten ni al salario de los empleados públicos ni a sus derechos, como sí ha ocurrido en las comunidades autónomas gobernadas por los compañeros del Partido Popular de Cospedal.

La diputada regional indicó que «el presidente Barreda ha querido que ese ajuste se produzca sobre el gasto corriente y haciendo que paguen más los que más tienen, como es el caso de las grandes empresas eólicas y los bancos».

Por otra parte, la representante socialista comentó que a Cospedal y a los dirigentes del PP les hubiera gustado que el presidente Barreda hubiera actuado como lo ha hecho el presidente de Murcia, Válcarcel. Les hubiera gustado -añadió- que se despidieran profesores, personal sanitario, etc, cargando los recortes sobre las espaldas de los empleados públicos y recortando sus derechos. Pero no ha sido así. Aquí tenemos otro modelo, aquí hacemos las cosas de otra manera y eso los ciudadanos de Castilla-La Mancha lo saben».

Valentín advirtió que «los ciudadanos tienen que saber que si Cospedal tuviera responsabilidades en Castilla-La Mancha estaría aplicando los mismos recortes que han puesto en marcha sus compañeros de partido en aquellas comunidades autónomas donde gobierna el Partido Popular de la señora Cospedal».

Estaría haciendo -explicó- lo que ha hecho Feijóo en Galicia, donde ha recortado 220 millones en los servicios sanitarios o donde los complementos a las pensiones mínimas han sufrido un recorte de 200 euros. Estaría haciendo lo que Camps en Valencia, que ha eliminado las ayudas de gratuidad de libros de texto o lo que hace Aguirre en Madrid, suprimiendo plazas de guardería o no aplicando la Ley de Dependencia, o lo que ha hecho Valcárcel en Murcia, donde han dado un tijeretazo a los sueldos y derechos de los empleados y servicios públicos.

Por último, la diputada socialista se refirió a que con este plan de ajuste se generará un ahorro de unos 775 millones de euros, de los que el 75% se producirán por ahorros en el gasto corriente de la Administración regional y el 25% restante como consecuencia de los reaujuste de inversiones, además de unos 200 millones de euros de nuevos ingresos optimizando la gestión de nuestro patrimonio y sin subir los impuestos ni a las familias ni a las pequeñas empresas.