El jefe del Ejecutivo autonómico reconoció que desde que ocurrió el accidente no ha habido día en que no se haya acordado de ellos. En este sentido señaló que la tragedia le impactó y aseguró que le afectó “en lo personal, en lo emotivo, en lo humano, en el dolor que sentía porque fue una tragedia impresionante”

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, proclamó hoy la inocencia de los cargos y funcionarios imputados por el incendio que tuvo lugar en La Riba de Saelices en 2005 y aseguró que es momento de recordar a las víctimas de esta catástrofe y a sus familias.

Barreda hizo estas declaraciones en referencia al auto de la Audiencia Provincial de Guadalajara en el que exculpa a los cargos y técnicos en la causa abierta por el incendio en el que fallecieron once personas y se quemaron 13.000 hectáreas.

“No es momento de pasar factura y no voy a hacer ningún reproche acerca de la utilización indecente que se ha intentado hacer, desde el punto de vista político, acerca de esta cuestión”, señaló el presidente, quien insistió en mostrar todo su apoyo y solidaridad a las familias de las víctimas, y también a aquellas personas que, habiendo sido acusadas e imputadas, hoy han sido absolutamente exculpadas “quedando claro que no han cometido ningún delito y que ni siquiera existe indicio alguno de que lo hayan hecho”.

Para el presidente, el auto, que consideró muy técnico y muy bien motivado, no sólo exculpa a los imputados, excepto a los que encendieron el fuego, que es lo más lógico, sino que además deja muy claro que no hay indicio alguno de delito que se pueda imputar.

Barreda quiso tener palabras de aliento, reconocimiento y respeto para las personas que, dijo, han sido acusadas durante muchos años. “Ahora, por fin, estarán tranquilos después del calvario que han sufrido”, señaló el jefe del Ejecutivo autonómico, que reconoció que desde que ocurrió el accidente no ha habido día en que no me haya acordado de ellos”.

En este sentido señaló que la tragedia le impactó y aseguró que le afectó en lo personal, en lo emotivo, en lo humano, en el dolor que sentía porque fue una tragedia impresionante”.

Barreda insistió en que “ésa es una cosa y otra muy diferente es la instrumentalización que se ha querido hacer de este asunto manteniéndolo vivo durante tatos años”. Pero, advirtió, “tiempo habrá de hacer un repaso de lo que ha dicho cada cual al respecto”.