“Como cliente de la Caja y como presidente de Castilla- La Mancha hoy estoy más tranquilo y más seguro”
“Como cliente de la Caja y como presidente de Castilla- La Mancha hoy estoy más tranquilo y más seguro”
“Como cliente de la Caja y como presidente de Castilla- La Mancha hoy estoy más tranquilo y más seguro”
El presidente autonómico adelantó que ha solicitado la comparecencia del Gobierno regional en las Cortes de Castilla-La Mancha para analizar la situación de la entidad financiera y reiteró que lo importante ahora es que se han asegurado los puestos de trabajo y los ahorros de los impositores.
Para el presidente autonómico la opción tomada ayer por el Gobierno central ofrece “más ventajas y garantías” y tras la aprobación del nuevo decreto-ley por el que se autoriza la emisión de un aval del Tesoro de hasta 9.000 millones de
euros todos podemos estar mucho más tranquilos y seguros.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró que como cliente de Caja Castilla-La Mancha y como jefe del Ejecutivo autonómico hoy se siente más tranquilo y más seguro después de que el Gobierno aprobara un decreto-ley por el que autoriza la emisión de un aval del Tesoro de hasta 9.000 millones de euros.
Barreda transmitió así un mensaje de tranquilidad y de “absoluta confianza” tanto a los trabajadores y clientes de la Caja como a toda la sociedad castellano-manchega, a la que recordó que en estos momentos CCM no puede tener mejor respaldo que el que ofrece el Banco de España y el Estado.
En este sentido, el presidente insistió en que CCM seguirá cumpliendo su papel de entidad financiera de la Comunidad Autónoma y eliminó cualquier tipo de duda y preocupación acerca del futuro de la Caja pues, según dijo, tras la medida adoptada hoy por hoy no hay entidad más sólida y más segura que CCM.
A este respecto, Barreda quiso dejar claro que la situación de la Caja castellano-manchega no se deriva de ningún problema patrimonial, pues no lo ha habido, y puntualizó que la causa está en la falta de liquidez provocada por la caída del sector inmobiliario, una problemática que, dijo, “no sólo ha afectado a CCM, sino a todas las entidades”.
Sin embargo, el presidente consideró que la Caja ha contado con otra dificultad añadida a la hora de superar la falta de liquidez y apuntó a una campaña sistemática y sostenida de descrédito, acoso y derribo que ha provocado que muchos clientes perdieran su confianza en la entidad y hayan optado por sacar sus ahorros.
“No hay entidad financiera que aguante tal campaña de descrédito contra su solvencia y su viabilidad”, aseveró Barreda, que no quiso señalar a nadie como responsable de esta estrategia ya que aseguró que el Gobierno regional no colaborará en ninguna “campaña de confusión” ya que, declaró, “Castilla-La Mancha es una Comunidad en la que todos nos conocemos y todos sabemos muy bien quiénes han protagonizado esta ceremonia basada en el cuanto peor, mejor”.
“Quien quiera oír, que oiga”
Barreda insistió en que “quien quiera oír, que oiga”, y aprovechó la ocasión para hacer un llamamiento a que finalice una estrategia que no beneficia absolutamente a nadie pues lo que hay que hacer ahora es que desaparezca esta campaña desestabilizadora así como cualquier tipo de duda sobre lo que más preocupa a la gente: sus ahorros.
Asimismo, el presidente explicó que la fusión con la entidad andaluza Unicaja no ha sido posible debido a que ha valorado sus necesidades muy por encima –más del doble- de lo que ha cuantificado el Banco de España.
Para el presidente regional, la opción tomada ayer por el Gobierno central ofrece “más ventajas y garantías” y un mayor margen de maniobra para tomar nuevas decisiones acerca del futuro de la Caja, y adelantó que ha solicitado la comparecencia del Gobierno autonómico en las Cortes de Castilla-La Mancha para tratar este asunto.
Finalmente, Barreda quiso dejar muy claro que el Gobierno regional nunca ha interferido en la gestión de CCM, una entidad que, hasta ayer, ha contado en su Consejo de Administración con representantes de todos los partidos políticos que, recordó, han aprobado por “unanimidad” los balances y las gestiones realizadas por la Caja.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ni ha opinado ni ha influido en estas decisiones, afirmó el presidente, que aseguró que la voluntad del Ejecutivo autonómico ha sido siempre que la Obra Social de la Caja repercutiera siempre en la Región.