El Gobierno de Castilla-La Mancha recurrirá el trasvase para riego aprobado por el Consejo de Ministros
El Gobierno de Castilla-La Mancha recurrirá el trasvase para riego aprobado por el Consejo de Ministros
El Gobierno de Castilla-La Mancha recurrirá el trasvase para riego aprobado por el Consejo de Ministros
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró hoy, momentos antes de que el Consejo de Ministros anunciara la aprobación de un nuevo trasvase, que esta decisión se produce en un momento muy delicado ya que los embalses de cabecera “están muy mal”. Según los datos oficiales del Ministerio, los embalses de Entrepeñas y Buendía continúan en una situación crítica; a día de hoy, los volúmenes de agua almacenados son tan sólo de 375 hm3, lo que representa poco más del 15 por ciento de su capacidad. El Gobierno regional ha mostrado su oposición a este trasvase y ha anunciado que recurrirá.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha mostrado hoy su oposición a la decisión del Consejo de Ministros de aprobar un nuevo trasvase de 21,86 hectómetros cúbicos, de los cuales 18 son para regadío, desde el Tajo a la cuenca del Segura, y ha anunciado que lo recurrirá en aplicación de la legalidad vigente.
La Comisión de Explotación del Acueducto Tajo-Segura, en su reunión del pasado 30 de junio, decidió proponer al Consejo de Ministros un trasvase de 76,3 hectómetros cúbicos, de los cuales 35,5 irían destinados a regadío. Esta propuesta no ha sido atendida, por lo que el Consejo de Ministros ha aprobado sólo 18 hectómetros cúbicos para regadío, la mitad de lo solicitado.
El Gobierno regional considera, no obstante, que el trasvase para regadío es injustificado e innecesario en estos momentos y para los meses inmediatos, dado que la precipitación media registrada en la zona de levante hasta la fecha está por encima de la media de los últimos años.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró, momentos antes de que el Consejo de Ministros anunciara la aprobación de un nuevo trasvase que esta decisión se produce en un momento muy delicado ya que los embalses de cabecera “están muy mal”.
Según los datos oficiales del Ministerio, los embalses de Entrepeñas y Buendía continúan en una situación crítica; a día de hoy, los volúmenes de agua almacenados son tan sólo de 375 hm3, lo que representa poco más del 15 por ciento de su capacidad.
En este sentido Barreda manifestó que “mas temprano que tarde, la fuerza de los acontecimientos nos va a dar la razón completamente en el sentido de que el trasvase tal y como se concibió, sacando agua de Entrepeñas y Buendía y para llevarla hasta el Segura, sin dejar una gota de agua en el camino, sin beneficiar a los castellano-manchegos, ya ha empezado a terminar”.
A este respecto dijo que van a ser muchos los castellano-manchegos que se van a beneficiar de esa agua que, hasta ahora ven pasar y no pueden utilizar. Se refirió el jefe del Ejecutivo a los municipios ribereños, siguiendo por los de la provincia de Cuenca que están junto al acueducto, y las ciudades de la Llanura manchega que van a poder obtener agua potable para beber.
Además, desde la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha se hizo constar, durante la reunión de la Comisión de Explotación, la necesidad de someter los trasvases y sus autorizaciones a Evaluación de Impacto Ambiental.
Barreda hacía estas declaraciones el mismo día en el que el Consejo de Ministros decidiera otro trasvase tras la propuesta de la Comisión Nacional de Explotación del Trasvase Tajo-Segura y apuntó “a ciencia cierta que explotan al Tajo”.
Para evitar esta situación, el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha propuesto un gran acuerdo nacional del agua con una premisa básica que garantice el agua para beber a todos los españoles y destierre las propuestas en las que se utilice para potenciar desarrollos que no son sostenibles.