El portavoz del Grupo Socialista, Santiago Moreno, asegura que “Molina decidió parar las negociaciones en diciembre de 2005 durante casi cinco meses. Y De Cospedal sustituyó a dos de los tres negociadores que el PP tenía en la mesa nada más llegar a Castilla-La Mancha"

El portavoz del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha, Santiago Moreno, criticó hoy el «doble juego político» del que hacen gala los dirigentes del PP de Castilla-La Mancha en relación con los plazos de aprobación del Estatuto de Autonomía. Para Moreno, «los mismos dirigentes del PP que piden ahora tanta celeridad para aprobar el Estatuto son los responsables de que el texto no llegara al Congreso hasta este mismo año».

Según el portavoz socialista, los miembros del PP regional que ahora, un día sí y otro también, piden explicaciones sobre la fecha de aprobación de la reforma del Estatuto regional en Madrid, “deberían explicar antes las dilaciones y retrasos varios que la negociación del texto sufrió antes en Castilla-La Mancha por las decisiones que, de manera unilatera,l tomaron, por ejemplo, los dos últimos presidentes populares en Castilla-La Mancha.

«El señor Molina decidió parar las negociaciones en diciembre de 2005 durante casi cinco meses. Y cuando en mayo de 2006 la señora De Cospedal sustituyó al señor Molina, lo primero que hizo fue sustituir a dos de los tres negociadoers que el PP tenía en la mesa», ha aclarado Moreno, para quien a los líderes del PP «les pasa siempre lo mismo: tienen poco memoria cuando quieren, pero ahí están las hemerotecas para sacarles los colores».

En el mismo sentido, desde el Grupo Socialista se ha querido recordar al PP que el presidente Barreda fue el primero en plantear la necesidad de reformar el Estatuto de Autonomía, ya en el año 2005, y que ha sido luego el impulsor del mismo. Y se ha añadido que Barreda tiene muy claro qué Estatuto quiere para Castilla-La Mancha, y que su liderazgo para conseguirlo es firme e inequívoco para los castellano-manchegos, incluso para muchos votantes del PP que no tienen los prejuicios de algunos dirigentes de su partido.