El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda ha expresado su satisfacción tras la sesión plenaria del Comité de Regiones celebrada en su sede, el edificio Charlemagne de Bruselas, sobre la futura OCM del Vino. En opinión del presidente Barreda, el texto que se elevará al Consejo y al Parlamento Europeo se ha mejorado sustancialmente y se ajusta mucho a lo que plantea Castilla-La Mancha, que sobre la propuesta inicial de reforma dijo no por nuestra gente, por razones económicas, sociales y medioambientales.

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, recibió hoy el apoyo del Comité de Regiones de la Unión Europea en la firme defensa de los intereses de castellano-manchegos, como quedó de manifiesto en el debate del dictamen sobre la ‘Comunicación de la Comisión al Consejo y al Parlamento Europeo. Hacia un sector vitivinícola sostenible’.

A preguntas de los medios de comunicación, el presidente Barreda expresó su satisfacción tras la sesión plenaria del Comité celebrada en su sede, el edificio Charlemagne de Bruselas, durante la que se han votado las enmiendas presentadas por las respectivas regiones europeas, para después proceder a la votación del texto definitivo.

Barreda precisó que el dictamen recoge los planteamientos de Castilla-La Mancha y subrayó, además, la intervención del ponente español, que en este caso ha sido el presidente de La Rioja, Pedro Sanz.

En el texto debatido hoy, según explicó Barreda, queda claro que el agricultor debe ser el centro de la reforma de la OCM del Vino, así como la postura contraria al arranque indiscriminado de viñas manifestada por comunidades autónomas como la de Castilla-La Mancha.

Asimismo, el presidente Barreda destacó una de las enmiendas aceptadas y que reponen una carencia clara reflejada en la propuesta inicial de la reforma de la OCM del Vino. De tal forma que se recuerda que de la uva, además de vino y mosto, se obtiene alcohol vínico, que es fundamental para el sector, para Castila-La Mancha y para las regiones europeas, que no podrían elaborar productos como el brandy o el oporto si carecieran del alcohol vínico procedente de Castilla-La Mancha.

Para Barreda, el texto se ha mejorado sustancialmente y se ajusta mucho más a lo que plantea Castilla-La Mancha, que sobre la propuesta inicial de reforma dijo no por nuestra gente, por razones económicas, sociales y medioambientales.

600.000 hectáreas de viñedo, fuente de riqueza y trabajo

Barreda defendió que los agricultores tienen que mantener su renta sin que se vea perjudicada por la aplicación de la reforma. Argumentó también razones económicas y sociales, pues 600.000 hectáreas de viña suponen riqueza y puestos de trabajo. Y en tercer lugar, comentó que la viña en Castilla-La Mancha no es susceptible de cultivos alternativos.

Los viñedos, agregó, son imprescindibles en nuestra Región para el desarrollo sostenible y rural porque fijan el suelo evitando la erosión y fija la población porque “allí donde hay viña, hay hombres y mujeres”.

Por último, insistió en que se trata de un cultivo social importante que arraiga a la gente, por lo que se mostró dispuesto a seguir dando la batalla en defensa de los intereses de los castellano-manchegos.

Debate en la sesión plenaria

En la sesión plenaria del Comité de las Regiones de la UE, que tuvo lugar esta tarde en Bruselas, se discutió el dictamen presentado en la Comisión de Agricultura a propuesta del ponente español sobre la OCM del Vino.

Dicho dictamen, que obtuvo el respaldo del Comité y que será elevado al Consejo y al Parlamento Europeo, incluye enmiendas que reforman el texto en puntos fundamentales para el sector vitivinícola castellano-manchego.

Estos aspectos consisten en que, finalmente, el dictamen reflejará expresamente que la reforma de la OCM no debe obviar el interés de los agricultores, debido a la importancia social de este cultivo, y recoge las diferentes variedades de productos dentro del sector: vino de calidad, mosto y alcohol vínico.

El alcohol vínico se incluyó en el dictamen a través de la enmienda presentada por Castilla-La Mancha, en la que se observaba la importancia de este producto para la Comunidad Autónoma y para otras regiones de Europa que elaboran sus productos utilizando alcohol vínico procedente de Castilla-La Mancha.

Asimismo, el dictamen rechaza rotundamente la opción de arranque de viñedo y la liberación de plantaciones; aprueba la necesidad de proporcionar información exhaustiva al consumidor para un consumo adecuado; y refleja que los aspectos de la comercialización y distribución son fundamentales para el sector y así deberá observarse en la OCM del Vino.

La importancia del sector vitivinícola en Castila-La Mancha

En Castilla-La Mancha, hemos revolucionado el sector en los últimos años modernizando estructuras, reconvirtiendo el sector, ganando calidad y por ello ahora somos un referente de oportunidades de inversión para grandes expertos (bodegas y enólogos) y una competencia para potencias exportadoras de primer orden.

La superficie del viñedo de nuestra Comunidad Autónoma, de 600.000 hectáreas, supone el 50% del total dedicado a este cultivo en toda España y representa la mayor concentración existente en el mundo, alcanzando el 7,6% de la superficie vitícola mundial y el 17,8% del viñedo europeo.

Además como principal cultivo de carácter social instalado sobre superficie de secano, afecta a 70.000 familias y 112.000 agricultores, genera 38.000 puestos de trabajo y 9 millones de jornales.

La industria enológi?!IdEntrada
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?2Titular?xSubtitulo ???Encabezado
???Desglose???URL?2URLAdic?2DescriptorURLAdic?2Archivo?2Imagen?2Sonido?2Video?2Ordenca en el año 2004 facturó 1.088 millones de euros y dio trabajo a 3.642 personas. Tenemos 224 cooperativas, 358 bodegas, 16 destilerías y 23 empresas que concentran mosto.

Las cooperativas se han modernizado, los sistemas de calidad infinitamente mejorado y en definitiva nuestros caldos se ganan la confianza de los consumidores y de los expertos.

Las exportaciones de vinos y mostos de Castilla-La Mancha han supuesto en el periodo 1999-2005 un incremento en valor de más de un 30% alcanzando la cifra de 1.337,91 millones de euros en ese periodo.

Castilla-La Mancha está aplicando la Ley regional de la Viña y el Vino, que define al vino como un alimento, y que está suponiendo importantes avances en la producción de uva, en la transformación del vino y en posibilidades de comercialización.

La aplicación de los planes de reestructuración de viñedo están suponiendo la adaptación de nuestras viñas a las nuevas exigencias en variedades y a las nuevas técnicas de cultivo que demandan los mercados. Cada año, desde el 2000, en que se puso en marcha esta medida dentro de la OCM, Castilla-La Mancha recibe la mitad de los fondos de reestructuración asignados a España.

En las campañas 2003/2004, 2004/2005 y 2005/2006 se han aprobado 211 planes de reestructuración que afectan a 12.550 viticultores, se están aplicando en más de 57.000 hectáreas y cuentan con unas ayudas de 367 millones de euros. En total desde el año 2000, gracias a los planes aprobados al efecto, se han reestructurado más de 130.000 hectáreas.

A esta ordenación y mejora de la producción se ha sumado una modernización de bodegas y cooperativas, con ayudas a través del programa FOCAL de la Consejería de Agricultura, que sitúan a Castilla-La Mancha en el nivel más alto en tecnología y que además se ha traducido en una mejora de la calidad de los vinos y una adaptación de las elaboraciones a las nuevas demandas de los consumidores. Actualmente, Castilla-La Mancha cuenta con los vinos más competitivos en la relación calidad-precio.

Nueva OCM del Vino

La nueva OCM del vino puede ofrecer nuevos retos y oportunidades para mejorar el equilibrio entre la oferta y la demanda, la competitividad del sector, la promoción del modelo de calidad europeo y la puesta en valor de la diversidad regional en las producciones (vino, mosto, alcohol vínico…)

Castilla-La Mancha, aparte de estas propuestas, quiere que la OCM incorpore un sistema que garantice la renta de los agricultores, mantenga la limitación de nuevas plantaciones, garantice el mercado único europeo, mantenga el presupuesto comunitario para el sector y mejore la comercialización de nuestros productos vitivinícolas.