El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha reiterado su planteamiento de adecuar las confederaciones hidrográficas y los órganos de gestión del agua a la actual organización territorial. Así, durante la inauguración en Toledo de la nueva sede de la Confederación Hidrográfica del Tajo, el Presidente Barreda recordó que casi dos millones de castellano-manchegos necesitarán para beber el agua del Tajo en breve y el consumo humano es el uso prioritario que establece la Ley de Aguas.

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró hoy en la inauguración de la sede que la Confederación Hidrográfica del Tajo (Toledo) que esta sede da cumplimiento a uno de los acuerdos que adoptó con la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, el 14 de marzo del año pasado. “Castilla-La Mancha confía, pero verifica, no por desconfianza, sino por la obligación de dar respuesta positiva a los ciudadanos”, señaló.

En este contexto, dijo que actuaciones de este tipo ponen de manifiesto el cumplimiento de los compromisos que se adoptaron en aquel encuentro. Del mismo modo señaló la “buena relación” que existe entre el Ministerio de Medio Ambiente y el Gobierno regional, y entre la Confederación Hidrográfica del Tajo y el Ejecutivo autonómico.

Tras destacar la importancia que para los ciudadanos tendrá esta sede, Barreda reiteró su planteamiento de adecuar los órganos de gestión del agua y las Confederaciones Hidrográficas a la organización política y territorial del Estado.

El presidente se refería concretamente a Castilla-La Mancha, que tiene competencias en diversas áreas como agricultura y ordenación del territorio, y no las puede ejercer de manera plena porque no las tiene sobre los órganos de gestión del agua. “Vamos a aprovechar la modificación del Estatuto de Autonomía para hacer esa adecuación”, indicó.

Asimismo aseveró que Castilla-La Mancha es una Comunidad Autónoma solidaria y que nunca faltará agua para beber en otros lugares que así lo requieran. En este contexto garantizó que el Gobierno hará lo que esté en su mano para garantizar las necesidades de los ciudadanos.

Aprovechó el presidente Barreda para recordar que casi dos millones de castellano-manchegos necesitarán para beber el agua del Tajo en breve y el consumo humano es el uso prioritario que establece la Ley de Aguas, de la misma manera que la cuenca cedente tiene prioridad sobre la receptora.

Depuración de aguas residuales

A este orden de cosas, dijo que la Confederación Hidrográfica del Tajo está haciendo un gran esfuerzo para conseguir la depuración de las aguas residuales de Madrid en el Tajo, una actuación incluida en el Plan de Calidad del Tajo. “En Toledo hay que tener un río limpio y no podemos renunciar a disfrutar algo de lo que disfrutaron nuestros antepasados”, manifestó Barreda.

Del mismo modo dijo que ese Plan de Calidad dará respuesta a las directrices que se imponen desde la Unión Europea para mantener el caudal ecológico del río.

Para el presidente Barreda, la sede de la Confederación Hidrográfica del Tajo “es un signo claro de hacia donde tenemos que caminar en la gestión de la Confederación y que se verá beneficiado de la relación de la relación entre la Administración y el administrado”.