El presidente del Ejecutivo regional, José María Barreda. mostró su intención de “encontrar formulas de consenso” para conseguir un texto nuevo para el Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha, que llegue a las Cortes “impecable desde el punto de vista jurídico y útil y beneficioso para los castellano-manchegos desde el punto de vista político”. Barreda realizó estas declaraciones tras la entrevista que mantuvo con el presidente regional del PP, José Manuel Molina.

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, tras reunirse con el presidente del Partido Popular en la Región, José Manuel Molina, dejó clara su voluntad de alcanzar un acuerdo para reformar el Estatuto de Autonomía de nuestra Comunidad Autónoma.

“Trabajar juntos en beneficio de Castilla-La Mancha, del interés general de nuestra tierra y dar un paso hacia delante firme y decidido en la modificación del Estatuto de Autonomía”. Esa es la intención que el presidente Barreda explicó a Molina en la reunión que han mantenido en el Palacio de Fuensalida, que duró algo más de una hora.

El jefe del Ejecutivo autonómico, que calificó de “extraordinariamente cordial” el encuentro, subrayó que el objetivo principal de modificar el texto del Estatuto de Autonomía es “conseguir lo mejor para nuestros paisanos”.

Para el presidente Barreda, la preocupación prioritaria debe ser “el interés y la defensa de Castilla-La Mancha”. En este mismo sentido, opinó que los ciudadanos no quieren que los políticos se enfrenten sistemáticamente y no lleguen a acuerdos nunca y añadió que el consenso es imprescindible cuando hablamos del Estatuto de Autonomía, que es la Ley Orgánica fundamental para Castilla-La Mancha.

A este respecto, aseguró que, en ningún momento, como presidente de Castilla-La Mancha ha considerado que las Cortes aprueben una reforma del Estatuto sin el acuerdo del partido en la oposición. “Quiero y busco el consenso con el PP por razones evidentes: porque el PP es la segunda fuerza política de la Región”, manifestó el presidente de Castilla-La Mancha.

Barreda puso de manifiesto que tiene la mano tendida al PP, a quien quién concede el protagonismo que se merece por su representación en el Parlamento regional.

El agua, las infraestructuras y el documento de la Federación de Municipios y Provincias, FEMP, fueron las cuestiones tratadas por Barreda y Molina, como temas latentes y protagonistas de la modificación estatutaria.

“No tenemos otra nacionalidad que la española”

Respecto a los pormenores del encuentro, el presidente reseñó asuntos tales como que el futuro texto del Estatuto no modificará la denominación de nuestra Comunidad Autónoma. “En Castilla-La Mancha no tenemos otra nacionalidad que no sea la española. Somos una Comunidad Autónoma, una región, según el artículo 2 de la Carta Magna”, manifestó.

En este mismo sentido Barreda aseveró que en Castilla-La Mancha “no necesitamos hacer debates esencialistas para saber, qué somos, dónde nos dirigimos y qué queremos, somos una parte crecientemente importante de España”.

“Debemos ser inteligentes para aprovechar esta coyuntura al máximo”, añadió tras recordar que cuando se aprobó el texto actual del Estatuto de Autonomía se hizo sin tensión autonómica porque no había sentimiento de región, “entonces no había nadie que se preocupara de que lo que saliera de aquel documento beneficiara el desarrollo de Castilla-La Mancha”, indicó.

Política hidráulica

Precisamente respecto al agua, el presidente Barreda aseveró que su postura es aprovechar la ocasión para terminar con las contradicciones que existen en relación al agua, “no se concibe que tengamos competencias en materias como agricultura o urbanismo y no tengamos poder de decisión en los órganos de gestión del agua”.

En este punto, el presidente de Castilla-La Mancha aseveró que, tanto PP como PSOE, “encontraremos fórmulas consensuadas para que el Estatuto de Autonomía llegue a las Cortes impecable desde el punto de vista jurídico y útil desde el punto de vista político”.

Por último Barreda, que explicó que este Estatuto establece las reglas de juego institucionales, sociales y económicas para Castilla-La Mancha, subrayó “estamos de acuerdo en trabajar juntos en beneficio de Castilla-La Mancha para conseguir buenos resultados para nuestra tierra”.