El portavoz del Grupo Socialista, José Molina, denuncia la actitud enloquecida de varios ministros del PP, que tan pronto dicen que les hubiera gustado invadir la isla Perejil o acusan al PSOE de Cataluña de pactar con asesinos

El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha, José Molina, a preguntas de los periodistas sobre el nivel de crispación que está alcanzado la precampaña electoral, señaló que el mismo está motivado por la actitud preocupante que están demostrando la mayoría de los representantes políticos del PP. «Están en una actitud enloquecida que ha llevado a que incluso algunos ministros del PP tan pronto dicen que les hubiera gustado invadir la isla Perejil, como acusan al Partido Socialista de Cataluña de pactar con asesinos o como el presidente autónómico de Murcia que se decida a insultar con un tono barriobajero al presidente de la Generalitat».

Para Molina, «esto es una muestra de que el PP no tiene ningún límite y cree que en política vale todo cuando no es así. Si esto es lo que le preocupa al PP y este es su tono de precampaña no sé donde nos van a llevar en la campaña con sus insultos y sus descalificaciones. Yo- añadió-quiero una campaña electoral donde podamos plantear y debatir los problemas de la gente, hablar de Educación, de Vivienda o de Infraestructuras, pero el PP parece haber decidido que sea ETA quien mande en la campaña electoral»

Mejoras de la línea Chinchilla-Cartagena

Por otra parte, el portavoz socialista explicó que la red ferroviaria en servicio que discurre por Castilla-La Mancha tiene una longitud de 1.612 kilómetros. de los cuales, 762 son de vía sencilla o única. En lo que respecta a la línea Chinchilla-Cartagena, con una longitud de 234 km, el portavoz socialista señaló entre las múltiples deficiencias de seguridad que la línea sólo cuenta como forma de control de tráfico el bloqueo telefónico y uno de los mayores peligros lo constituyen los 20 pasos a nivel de Renfe y otros tantos dependientes de los Ayuntamientos, la mayoría de ellos sin barreras, así como la ausencia de vallado de la vía entre Albacete y Murcia.

El portavoz socialista informó que en esta línea circulan 10 trenes diarios de Grandes Líneas de lunes a viernes, 6 los sábados y 8 los domingos con un total de 560.000 viajeros en el 2002 y 45.000 menos en el 2003, imputando este descenso a los graves accidentes sufridos en Tobarra y Chinchilla.

Por otra parte destacó que la velocidad comercial de esta línea es muy baja, ya que en el trayecto existen numerosos puntos con limitaciones de velocidad de 60 y 80 km/h y que sólo con la sustitución de máquinas previstas, Renfe espera incrementar el número de viajeros hasta 600.000 pasajeros.

Molina recordó que desde el año 2000 en el que desaparecieron de los Presupuestos Generales del Estado las inversiones para la variante de Camarilla y otras, el Gobierno de Aznar y del PP se ha caracterizado por el olvido de esta línea que se puso de manifiesto en los dos accidentes ferroviarios registrados en Albacete y sobre los cuales el propio presidente del Gobierno y los ministros, no dudaron en imputar a errores humanos y gamberradas, lo que todo apunta a una falta de mantenimiento y modernización de la propia línea.

Por esta razones -dijo- el Grupo Socialista de las Cortes de Castilla-La Mancha insta a Fomento a la modernización y la electrificación de la línea férrea Albacete-Murcia, a la puesta en marcha de trenes de cercanías para comunicar las poblaciones de Tobarra, Hellín, y Chinchilla con Albacete, a eliminar todos los pasos a nivel sin barreras que todavía existen, así como a la construcción de pasos elevados en aquellos términos urbanos que atraviesa y por último a dotar a la línea ferroviaria Albacete-Murcia, de los sistemas de seguridad necesarios que garanticen a los usuarios de la misma, la utilización sin riesgos del transporte por ferrocarril como son las comunicaciones Tren-Tierra y sistemas de control centralizado de tráfico.