El portavoz socialista, José Manuel Caballero, pide al Gobierno que extienda el abono social a parados, pensionistas y ciudadanos con cargas familiares que no alcancen ingresos familiares mínimos".

El portavoz de la Ejecutiva Regional del PSOE, José Manuel Caballero, ha criticado hoy duramente la intención del Gobierno del PP de permitir a Telefónica la subida, para el próximo año, de la cuota de abono telefónico – el que se paga siempre, aunque no se efectúen llamadas-. Este incremento fijado en 0,55 euros situaría en 13,16 euros esta cuota, lo que representa un incremento del 4,36% sobre los 12,61 euros que se pagaban actualmente 17 millones de ciudadanos. Según Caballero, desde que en 1998 el Gobierno de Aznar abriera la mano y permitiera las alzas del abono mensual, entonces fijado en 7,4 euros, el precio de la cuota casi se ha duplicado.

Para el portavoz socialista, de aprobarse esta medida, que calificó de «injusta y poco razonable», los ciudadanos y familias con menos recursos serán los grandes perjudicados, «ya que la factura real subirá para todos, llamen o no por teléfono», añadiendo, «el Gobierno del PP, que tanto alardeó de que iba a bajar los impuestos, lejos de hacerlo ahora pretende convertir un servicio básico como la telefonía en un artículo de lujo».

Para Caballero, es «escandaloso volver a autorizar la subida de la cuota de abono mensual, que no es neutra, ya que afecta en gran parte a los más desfavorecidos, para quienes es un servicio imprescindible y por el que en muchos casos pagan más de cuota que por consumo».

Este nuevo atentado contra los consumidores y usuarios, en palabras de Caballero, no va a ser compensada porque se vayan a reducir los precios de las llamadas internacionales, que se usan poco, «ya que Telefónica tiene previsto mantener también los precios de las llamadas locales, que son las que más utilizan los ciudadanos».

Para el portavoz de la Ejecutiva Regional socialista, el Gobierno del PP, de nuevo quiere favorecer a sus amigos de Telefónica, «y no lo decimos sólo nosotros sino también lo han denunciado las asociaciones de consumidores y usuarios y las propias operadoras que son competencia de Telefónica, que han afirmado que el Gobierno pretende, con esta subida, que Telefónica vuelva al monopolio y lejos de liberalizar el sector para facilitar una competencia real, va a conseguir que las operadoras alternativas tengan cada vez menos posibilidades de supervivencia».

Caballero recordaba que esta medida «desproporcionada», que está causando un daño a millones de economías domésticas, viene precedida por otras como la subida del recargo que se aplica sobre las tarifas de las cabinas telefónicas, que ha supuesto que el precio de una llamada normal de abonado se haya incrementado un 12%.

Así mismo, el portavoz socialista ha solicitado al Gobierno del PP, que en lugar de ayudar a Telefónica frente al resto de operadoras, lo que debería hacer, «es extender, el abono social -exención del 90% de la cuota de abono- a parados, pensionistas y ciudadanos con cargas familiares que no estén obligados a realizar la declaración de la renta, por no alcanzar unos ingresos mínimos».