José Bono, que participó en diferentes actos en Castilla-León, asegura que una guerra contra Irak "perjudicará gravemente los intereses de España" y afirma que entre los planteamientos de George Bush, "a los que el Gobierno de España se ha sometido", y los de Juan Pablo II, "me quedo con la voz del Papa".

La «ola» que propicia el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, con su «imagen de hombre bueno y persona de la que se puede fiar» se notará en las próximas elecciones municipales y autonómicas, según el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, José Bono.

Bono, que participó hoy en Valladolid en un acto público organizado por el PSOE de esta provincia, señaló en rueda de prensa que el partido que se encontró Rodríguez Zapatero a su llegada a la secretaría general se encontraba «bajo mínimos», mientras que ahora las encuestas le dan una valoración por encima de la del presidente del Gobierno, José María Aznar, lo que es «mérito suyo».

«El secretario general no lo está haciendo bien sino muy bien», aseguró Bono, quien no dudó de que Rodríguez Zapatero será el próximo presidente del Gobierno tras las elecciones de 2004.

El presidente de Castilla-La Mancha alabó la «imagen de hombre bueno y de persona de la que se puede fiar» que transmite Zapatero, de quien también destacó «una capacidad y una inteligencia por encima de toda duda».

En cuanto al PP, consideró que esta entrando «en barrena», desde el «decretazo» que terminó en una huelga general y que luego fue modificado, pasando por el Prestige, en «el que lo grave no es que el barco tenga una avería sino que los populares estén de caza y esquiando»; o un AVE que no puede terminar un viaje promocional y se rompe una catenaria y «la llevan en procesión como si fuera el Corpus Christi» aduciendo que es un sabotaje.
«Cómo puede tener un Gobierno a su población como saboteadora cuando el único sabotaje es su propia ineficiencia. Han perdido el norte», afirmó.

«La guerra perjudicará gravemente los intereses de España»

Por otra parte, el presidente Bono, aseguró en Aranda de Duero (Burgos) que una guerra contra Irak «perjudicará gravemente los intereses de España». José Bono, durante un acto en el Ayuntamiento arandino, afirmó que «entre los argumentos» del presidente de Estados Unidos, George Bush, «a los que el Gobierno de España se ha sometido», y los de Juan Pablo II, «me quedo con la voz del Papa».

Bono añadió que «no hay ninguna guerra preventiva lícita» y declaró que la posible intervención bélica de Estados Unidos en Irak «va a ser una matanza».
El presidente castellano-manchego manifestó que en España la opinión pública se ha posicionado de manera generalizada en contra de la guerra y calificó la actitud del presidente del Gobierno, José María Aznar, de «obstinada ante la evidencia», en alusión al rechazo social a un conflicto bélico.