"No solo los grupos políticos tienen que reivindicar su historia, tienen que hacerlo las instituciones democráticas"

El Grupo Socialista en la Diputación de Guadalajara llevará al próximo pleno una moción en la que pide que la Institución Provincial promueva un reconocimiento institucional a los dos presidentes que tuvo durante la Segunda República, Enrique Riaza y Gregorio Tobajas, y que fueron fusilados por la dictadura franquista en 1940. Desde el PSOE se ha dejado claro que “pretendemos que la moción se apruebe por unanimidad, e incluso que se adopte como declaración institucional, para lo que estamos dispuestos a consensuar los términos, siempre que no se pierda el significado de la iniciativa”.

El contenido de la moción ha sido detallado por el portavoz del Grupo Socialista en la Diputación, Julio García, con el apoyo del secretario provincial del PSOE, Pablo Bellido, quien ha subrayado que “la iniciativa tiene que ver con una reivindicación no de la memoria histórica, sino de la justicia con quienes defendieron la democracia”, ya que “consideramos que no solo desde el PSOE tenemos que reivindicar nuestra historia, lo tienen que hacer las instituciones democráticas, porque somos los herederos de los hombres y mujeres valientes que se opusieron al franquismo y a un golpe de Estado y que lucharon para que en España hubiese libertad e igualdad y tuviésemos derechos”.

Bellido ha incidido en que “no se presenta esta moción para ofender a nadie, sino para que las familias de ambos presidentes tengan ese reconocimiento y para que la sociedad tenga ese ejemplo que nos sirva de referente y de guía”. El secretario provincial del PSOE ha añadido que “hay razones para sentirnos muy orgullosos de los hombres y mujeres que lucharon por la libertad y pedimos a todos los que hablen de democracia, que reivindiquen ese pasado democrático de nuestra provincia, que fue sepultado por la tiranía y la dictadura franquista”.

Condena de la Diputación a los juicios sumarísimos y fusilamientos.

Por su parte, Julio García ha resaltado que Enrique Riaza y Gregorio Tobajas fueron detenidos  al terminar la Guerra Civil, encarcelados, sometidos a consejos de guerra sumarísimos, condenados a muerte y fusilados “por haber sido presidentes de la Diputación, es decir, por haber  dedicado años de esfuerzo a mejorar las  condiciones de vida de los pueblos de la provincia, además de por sus ideas de izquierdas”. De hecho, en sus respectivas sentencias figura como uno de los cargos por los que se les condenó a muerte “ejercer el cargo de presidente” de la Diputación de Guadalajara.

García considera que la Diputación tiene una deuda con ambos y, por ello, en la moción propone que la Diputación de Guadalajara exprese su condena y declare la injusticia de los procesos sumarísimos que condenaron a muerte a los presidentes Tobajas y Riaza, que promueva un acto de reconocimiento, para lo que el Grupo Socialista sugiere la colocación de una placa en un lugar visible del exterior de la Diputación Provincial, y que promueva también, de acuerdo con sus familias y con los ayuntamientos, sendos homenajes en sus lugares de nacimiento: Sigüenza en el caso de Gregorio Tobajas y Brihuega en el de Enrique Riaza.

Enrique Riaza fue presidente de la Diputación en dos periodos: abril de 1931-febrero de 1934 y  febrero de 1936-enero de 1937. Veterinario de profesión, militante de Izquierda Republicana, de la que llegó a presidir su Comité Provincial,  y director del semanario “Abril”, fue fusilado el 20 de mayo de 1940, a los 50 años de edad. Gregorio Tobajas presidió la Diputación desde marzo de 1938 a febrero de 1939. Afiliado al PSOE y a la UGT, fue uno de los fundadores de la Federación Provincial del PSOE, en 1937, de la que fue su primer secretario general. Fue fusilado en la madrugada del 3 de mayo de 1940.

Oleada de robos en Campisábalos.

Por otra parte, Pablo Bellido se ha referido a la oleada de robos registrados la pasada semana en el municipio de Campisábalos. Ha señalado que “mientras el miércoles de producía esa oleada de robos, que se suman a otros muchos ocurridos en la provincia de Guadalajara, a pocos kilómetros el cuartel de la Guardia Civil de Condemios seguía cerrado, por más que el Gobierno respondiera hace apenas un mes que no había ningún cuartel cerrado en Guadalajara”.

A juicio de Bellido, “lo que está haciendo el Gobierno de España con la seguridad ciudadana en Guadalajara es un escándalo y debería llevar a que el subdelegado del Gobierno se plantease a quién defiende, porque da la sensación de estar aquí para tapar la inacción del Gobierno de Rajoy, no para que se actúe”.