El presidente del ejecutivo autónomo, José María Barreda, ha pedido a toda la sociedad un esfuerzo de unión y coordinación para defender la política hidrológica de Castilla-La Mancha. Estas manifestaciones fueron realizadas durante la celebración de las jornadas sobre la gestión del agua en Castilla-La Mancha, que se celebran en Albacete. El presidente Barreda también anunció que el próximo día 25 de este mes se reunirá el Consejo Regional del Agua, al que están convocados 40 representantes sociales de la región y en el que se abordará la política hidráulica en la reforma de nuestro Estatuto de Autonomía.

El Consejo Regional del Agua de Castilla-La Mancha se reunirá el próximo día 25 de octubre, para abordar la política hidráulica en la reforma del Estatuto de Autonomía, un órgano que se reunirá por segunda vez y al que están convocados unos 40 representantes sociales de la región.

En este Consejo está previsto que se debatan aspectos relacionados con las cuencas hidrográficas que afectan a la Comunidad Autónoma, principalmente las de los río Guadiana, Júcar, Segura y Tajo.

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, que anunció hoy esta fecha en las Jornadas sobre gestión del agua, que se celebran en el Paraninfo del Campus Universitario de Albacete, solicitó un esfuerzo de unión y coordinación para definir la política hidrológica de Castilla-La Mancha.

“No debemos ser rivales dentro de nuestra tierra. Os pido ayuda, colaboración y corresponsabilidad, porque tenemos la oportunidad de hacer bien las cosas en una cuestión muy difícil que nos beneficia a todos”, apuntó Barreda.

José María Barreda subrayó que la escasez de agua en nuestra Región es un problema estructural no coyuntural, que se agrava por el tipo de desarrollo que está registrando España.

En este contexto, Barreda recordó que desde el Gobierno autonómico se han planteado tres cuestiones en beneficio de la política hidráulica: llevar a cabo las infraestructuras necesarias para poder hacer uso del agua de los ríos que tienen aquí su cabecera y discurren por nuestra Región; modificar la legislación vigente en los aspectos que nos perjudican y discriminan y cambiar la mentalidad para concienciar a toda la población de que se trata de un recurso muy escaso y, por lo tanto, muy valioso.

En alusión a la segunda de las cuestiones, la modificación de la legislación vigente, el presidente regional aludió a la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha. Se trata de que en el texto autonómico quede reflejado que la Región debe tener capacidad de decisión en las confederaciones hidrográficas, así como en los órganos de explotación del Trasvase Tajo-Segura.

“Nosotros cambiamos el Estatuto porque lo necesitamos, no por capricho. Lo que tenemos que hacer desde las Cortes regionales es ofrecer un texto unitario que defienda el interés de Castilla-La Mancha”, aseveró Barreda.

En ese punto, el presidente del Gobierno regional subrayó la necesidad de reivindicar ese poder de decisión en los órganos de gestión del agua también por razones de sostenibilidad medio ambiental. Para el presidente Barreda, es necesario conseguir la regeneración hídrica de los ríos y de los acuíferos, garantizando al mismo tiempo la renta de los agricultores.

“Tenemos que ser todos responsables para hacer compatibles los intereses, en algunas ocasiones, contrapuestos de todos aquellos que están directamente relacionados con el agua”, apuntó Barreda.

Por último, incidió en la importancia trascendental que tiene el agua como recurso vital, porque “donde no hay agua, no hay vida”, concluyó José María Barreda, que estuvo acompañado en este acto por el presidente del Consejo Económico y Social, Juan Antonio Mata.