“En los próximos cinco años, el Gobierno regional va a construir 35.000 viviendas con algún tipo de protección”. Estas fueron algunas de las manifestaciones del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, durante el acto de entrega de las llaves de 60 Viviendas de Protección en Albacete. Barreda señaló que la vivienda protegida es una prioridad para el Ejecutivo autonómico y manifestó que nuestra región se desarrolla “porque ya no depende de personas ajenas y lejanas, sino de los castellano-manchegos”.

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, reiteró hoy en Albacete el compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha de construir en cinco años un total de 35.000 viviendas todas ellas con algún tipo de protección, de las que unas 7.500 están previstas para la provincia de Albacete. Barreda garantizó que la vivienda protegida es una prioridad para el Ejecutivo autonómico.

Barreda hacía estas declaraciones momentos antes de entregar las llaves a los propietarios de las 60 viviendas de Protección Pública que ha financiado el Ejecutivo Autonómico en la capital y que han sido proyectadas en dos bloques, uno de los cuales con características bioclimáticas.

En este contexto el presidente adelantó que el próximo mes de mayo está previsto entregar las llaves de otras 42 viviendas de protección, las correspondientes al conocido edificio “La Paz” en la capital. Pero las actuaciones de la Junta no se quedan aquí, así explicó que en la capital están proyectadas un total de 340 viviendas de Protección Pública repartidas en la zona del Paseo de la Cuba, el antiguo matadero y en la carretera de Murcia.

Barreda, que estuvo acompañado por el consejero de Vivienda, Alejandro Gil, y por el alcalde de la capital, Manuel Pérez Castell, explicó que para el resto de la provincia están proyectadas 56 viviendas de protección pública: 18 en Villarrobledo, 20 en Isso-Hellín, 12 en Liétor y 6 en Pozocañada.

Las previsiones del Gobierno autonómico en viviendas de Protección para la provincia de Albacete ascienden a 498. “Hemos dado un salto cualitativo en nuestro desarrollo y lo que hemos hecho esta tarde es buena muestra de ello”, apuntó el presidente.

El jefe del Ejecutivo castellano-manchego puso en valor las cualidades y características de las 30 viviendas bioclimáticas correspondientes al denominado edificio “Dulcinea” y mostró satisfacción al aseverar “nos hemos adelantado al resto del territorio español, porque a partir de muy poco tiempo lo que hoy hemos hecho en Albacete, va a ser de obligado cumplimiento”.

Del mismo modo, significó el ahorro energético que estas viviendas conllevan. Según subrayó Barreda, cada piso conlleva un ahorro energético de 600 euros al año y “contribuye al mantenimiento de un clima más favorable y al desarrollo sostenible”, apuntó.

Tras poner en valor las características de los pisos y desear felicidad en el disfrute de las mismas, José María Barreda pidió a los propietarios que no escatimaran en consultar con la administración regional cualquier cuestión que surja al respecto.

“Tengo una gran ambición por mi tierra, por Castilla-La Mancha, que se desarrolla porque ya no depende de personas ajenas y lejanas, sino de los castellano-manchegos”, concluyó.