El candidato socialista destaca el interés que ha mostrado en asuntos clave para la provincia, como el agua, proponiendo un debate sobre esta materia

El candidato del PSOE de Guadalajara al Congreso, Pablo Bellido, ha mantenido esta mañana un encuentro con responsables de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), entre ellos su máximo responsable regional y provincial, Ángel Galve. Bellido ha querido reconocer el compromiso de esta organización con el desarrollo de las actividades agrícolas y ganaderas, y también el interés que han mostrado en las propuestas políticas sobre el agua, un asunto esencial tanto para este sector como para el conjunto de nuestra provincia.

De hecho, COAG incluso ha planteado durante esta campaña un debate sectorial sobre agua entre los cabezas de lista al Congreso de los cuatro partidos con posibilidades de obtener representación por Guadalajara. “El PSOE fue el primero en aceptar la invitación, porque nosotros consideramos que los debates son un derecho de los ciudadanos, a diferencia de otros partidos, como el PP y Podemos, que ni siquiera se dignaron contestar”, ha recordado Bellido. Además, ha subrayado que los candidatos socialistas por Guadalajara han suscrito hoy mismo una serie de compromisos con la provincia y con su gente, entre los que figuran en lugar destacado la defensa del agua y la captación de fondos para desarrollo rural.

Regadíos de Cogolludo

Los responsables de COAG, una organización que tiene ya cerca de un millar de asociados en Guadalajara, han manifestado también su preocupación por el desarrollo de proyectos muy importantes para un buen número de agricultores de la provincia, como el regadío de Cogolludo, del que se podrían beneficiar más de 200 familias de esa comarca. Después de cuatro años de parálisis durante el periodo de Gobierno de Cospedal, el proyecto de presupuestos regionales para este año incluía una partida de 7,5 millones de euros para regadíos, entre los cuales el de Cogolludo era absolutamente prioritario.

Sin embargo, una enmienda de Podemos, que fue apoyada por el PP, obligó a rebajar sensiblemente esa cantidad, lo que ha planteado un serio obstáculo para la finalización de los trabajos que aún están pendientes. Aunque el Gobierno regional ha asegurado que destinará los recursos necesarios para hacerlo.