El secretario general del PSOE y candidato a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, mantuvo un encuentro esta tarde en Albacete ante medio millar de militantes socialistas venidos de toda la provincia.

Pedro Sánchez fue recibido por el secretario general del PSOE-Albacete y diputado nacional, Manuel González Ramos y por el resto de la candidatura socialista que repetirá en la próxima convocatoria de eleccione el 26 de junio.

Manuel González Ramos dio la bienvenida a Albacete a Pedro Sánchez y le transmitió los saludos del presidente Emiliano García-Page, asegurando que “España te quiere, Castilla-La Mancha te quiere y Albacete te quiere, Albacete es tu casa y la gente está contigo”.

 El candidato socialista por Albacete  explicó que “Pedro Sánchez ha hecho algo esta tarde que le gusta y que Cospedal no pudo hacer en muchos años, y es simplemente darse un paseo por la calle Ancha deteniéndose y escuchando a la gente”.

 González Ramos subrayó que “todos los socialistas de Albacete te admiramos porque hemos visto tu trabajo y cómo te has empleado para conseguir un Gobierno del cambio.

 El secretario general de los socialistas albaceteños ironizó sobre el lema del PP: España en serio, afirmando  si es que era una broma un partido  cercado por la corrupción, o si también era una broma del PP cuando  dijo que no iba a traspasar las líneas rojas de la sanidad, de la educación y del bienestar social.

 “Nosotros, el PSOE, sí somos serios y lo hemos demostrado. Millones de ciudadanos –señaló-  lo están pasando mal y pueden que estén hartos pero  es en estos momentos cuando hay que sacar la raza y el liderazgo de los socialistas y tirar de emociones y de corazón porque los políticos deben sentir y compartir emociones para poder hablar con la gente”.

 En este sentido aseguró que “la vida política es estar cerca de la gente y para eso hay que tener un líder y voluntad de cambiar las cosas y para un Gobierno del cambio hay que decir sí al Partido Socialista y a Pedro Sánchez”.

Por último González Ramos afirmó recordando las palabras del fundador del PSOE, Pablo Iglesias, que “el partido no solo tenía que tener adeptos y militantes que compartieran nuestra ideología, y nuestros mensajes  y nuestras sensibilidades, sino también por la imagen de sus líderes y de sus gobernantes y Pedro Sánchez trabaja para que el PSOE tenga una gran imagen y por eso el cambio va ser posible”.

Solo la papeleta del PSOE será un sí al cambio

Por otra parte Pedro Sánchez, aseguró que “España se juega su futuro el 26 de junio y habrá muchas papeletas en los colegios que significarán un no al cambio y solo la del PSOE será la del sí. 

El candidato socialista a la presidencia del Gobierno  dijo que en esta campaña los socialistas “no vamos a agitar banderas ni hablar de sillas, hablaremos de los problemas de la sociedad española y de sus soluciones. Queremos reconstruir el Pacto de Toledo y blindar la financiación pública de nuestro sistema de pensiones. Nosotros hablaremos –dijo- de cómo garantizar el sistema público de pensiones para hoy y para mañana porque el Gobierno del PP se ha pulido el fondo, ha pasado de tener 66.000 millones en 2011 a 32.000 millones este año. Si sigue Rajoy, en tres años –sentenció- se acabó la hucha de las pensiones. 

Sánchez explicó que en la actualidad hay un jubilado por cada cuatro trabajadores, pero en 2050 será al revés y garantizar y sostener las pensiones no se puede hacer solo con las cotizaciones a la Seguridad Social. Por eso –argumentó- el PSOE  propone inspirarse  en otros sistemas europeos y proponemos un recargo extraordinario que paguen las grandes fortunas y las grandes empresas para mantener las pensiones públicas.

 Asimismo ha reiterado su compromiso de que si el PSOE llega al poder derogará la reforma laboral, paralizará la LOMCE para "construir un nuevo pacto educativo" y reformará la Constitución Española porque "la España de 1978 no es de la de 2016".

De igual forma, ha propuesto "un acuerdo social, político e institucional para luchar contra la violencia de género", además de otro "gran acuerdo para luchar contra la corrupción" y también se ha comprometido, si gobierna tras el 26-J, a que España acoja "a los 18.000 refugiados" que le corresponden, porque España es un país solidario.