Fernández señala que los dirigentes del PP están poco legitimados para exigir a un ejecutivo que lleva 7 meses "medidas urgentes para arreglar la sanidad que ellos destrozaron"

Afirma que lo que deberían hacer los 'populares' es dejar trabajar al actual gobierno y además "pedir perdón por haber despedido a miles de profesionales sanitarios, por haber intentado privatizar 7 hospitales públicos y cerrar las urgencias nocturnas de muchos pueblos"

Asegura que está quedando en evidencia que el asunto de Gibacars en Almansa "era muy probablemente un plan premeditado, una farsa" para que el PP ganara las elecciones en esta localidad

La portavoz del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha asegurado hoy que los dirigentes del PP “están muy poco legitimados para exigir a un gobierno, que lleva siete meses, medidas urgentes de una sanidad que ellos destrozaron”.

Y es que, argumentaba la portavoz socialista, los ‘populares’ heredaron del anterior gobierno socialista uno de los tres mejores servicios sanitarios de España, “y en tan solo cuatro años lo destrozaron”.

Ahora, indicó Fernández, el gobierno de Emiliano García-Page se ha puesto manos a la obra para reconstruir todo lo destruido y “está curando las graves heridas que Cospedal y su ejecutivo causaron a la sanidad pública de Castilla-La Mancha y en esta tarea se va tardar tiempo porque es mucho más fácil y rápido destruir que reconstruir”.

Para Fernández, lo que deberían hacer los dirigentes del PP es dejar trabajar al actual gobierno, “tener un poco de responsabilidad y además pedir perdón por haber intentado privatizar 7 hospitales de la región o por haber intentado dejar a miles de ciudadanos sin urgencias por las noches o pedir perdón a los 2.000 profesionales que despidieron y a los médicos a los que llamaban vagos y les acusaban de dormir durante las guardias”.

“La farsa de Gibamotors”

Por otra parte, la portavoz del Grupo Socialista quiso salir al paso de las falsas acusaciones del alcalde de Almansa y diputado regional, Francisco Núñez, sobre que la Junta de Comunidades no ha apoyado la instalación de la empresa Gibacars en su localidad.

Explicó que lo único que ha hecho el Gobierno regional es pedir información y documentación sobre el proyecto que esta empresa quería llevar a cabo en Almansa, “un proyecto que fue rechazado en otras comunidades autónomas”. Y preguntó si lo que pretendía Núñez y el PP es que se diera dinero público a esta empresa “sin comprobar antes si detrás había un verdadero proyecto de futuro”.

Para Fernández, lo que está quedando en evidencia en todo este asunto es que “muy probablemente había un plan premeditado y todo era una farsa para ganar unas elecciones”.

En este sentido, indicó que el alcalde de Almansa y el PP utilizaron y manipularon los sentimientos y el sufrimiento de miles de desempleados prometiéndoles un empleo que ahora no va a llegar”. “Han estafado a los 20.000 desempleados que entregaron sus curriculums con la esperanza de conseguir un puesto de trabajo”.

La portavoz socialista instó a Núñez a “no intentar echar la culpa a los demás de un asunto del que es el responsable, por haber prometido algo que no va a poder cumplir”.

Elcogas

Fernández indicó que lo que ha ocurrido con Gibamotors es algo muy parecido a lo que ha pasado con Elcogas, donde, desde un primer momento, no ha habido intención de salvar a esta empresa.

“Han ido ganando tiempo, convocatoria electoral tras convocatoria electoral, engañando a la empresa y a los trabajadores prometiendo una solución que no ha llegado”, sentenció.

La portavoz socialista indicó que fue el actual gobierno de España quien cambió el régimen retributivo para esta empresa, provocando que ahora esté en esta situación, “y debe ser el gobierno de la nación quien solucione este problema”.

Por último, mostró su esperanza en que tanto la presión de los trabajadores como la del gobierno de García-Page sirvan para que esta empresa no cierre “porque Castilla-La Mancha no se puede permitir el enésimo palo que le da el gobierno de Rajoy y Cospedal”.