El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha asegurado este lunes que el juez Ruz y los letrados tras su declaración como testigo en la Audiencia Nacional «han podido aclarar muchos asuntos y dudas» que tenían en torno a la investigación abierta por la supuesta mordida de 200.000 euros en el contrato del servicio de basuras de la capital regional para la campaña electoral del PP de Cospedal en 2007.

García-Page, en declaraciones a los periodistas tras casi dos horas de declaración en la Audiencia Nacional, ha explicado que ha comparecido «para ayudar al juez» en su investigación y que le ha contado las «desavenencias técnicas» que detectó el actual Gobierno municipal entre el pliego de condiciones y el contrato del servicio que adjudicó en su momento el PP.

En este sentido, el regidor toledano ha explicado que su equipo de Gobierno «se vio vinculado por un acuerdo que como todos los que firma un alcalde debe asumir el siguiente» y que el mismo le vinculó a un compromiso de gasto laboral porque en su momento, el Gobierno municipal del PP no los había tenido en cuenta en el proceso de contratación «en una concesión que iba para varios años».

«Nos costó discutirlo en un plan de gestión, pero conseguimos un buen acuerdo porque la empresa tuvo que gastar finalmente en la ciudad 1,8 millones de euros más de lo que hubiera sido en una aplicación literal del contrato, pero nos disgustamos mucho al comprobar que no se había tenido en cuenta los gastos e incrementos laborales que nos tocó asumir a nosotros», ha afirmado García-Page.

«En definitiva – ha añadido el alcalde- nos tocó asumir el marrón de un acuerdo que puede ser legal o ilegal pero que vinculaba lógicamente y nos obligó a negociar» con la empresa, la misma que, ha apuntado, tenía «otro contrato hecho en baja temeraria dos meses antes de las elecciones por un importe de 1,4 millones de euros».

Los dirigentes del PP deben dar explicaciones contundentes

El alcalde de Toledo, preguntado sobre la supuesta comisión de 200.000 euros del contrato del servicio de recogida de basuras que, según el extesorero del PP Luis Bárcenas habría ido a la campaña electoral de la actual presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, en 2007, ha asegurado que los dirigentes del PP «son quienes deben dar explicaciones contundentes».

«El problema es que tienen que dar explicaciones de dónde están esos 200.000 euros que Cospedal reconoció que existen pero que ahora no aparecen ni en la contabilidad del PP, ni en la Sindicatura de Cuentas ni en el Tribunal de Cuentas».

A juicio de García-Page, el extesorero del PP está en la cárcel «a pesar de negar todo lo que se le acusa, pero hay una cosa que reconoce y es que dio 200.000 euros a Cospedal a través de Tirado como intermediario y se está autoinculpando. Parece bastante elemental que hay que investigar a cien por cien cuando alguien se autoinculpa».

«Deben dar esa explicación contundente y no la van a encontrar en García-Page, por mucho que me acusen de seguir sus pasos, de ser su primo hermano. Solo faltaría que me acusaran de haberle tenido yo de gerente´», ha sentenciado.