‘Aunque esté dentro de la ley, nos oponemos al último trasvase porque no es prudente’
‘Aunque esté dentro de la ley, nos oponemos al último trasvase porque no es prudente’
‘Aunque esté dentro de la ley, nos oponemos al último trasvase porque no es prudente’
El portavoz del Grupo Socialista, José Molina, critica el cambio "radical" del PP de C-LM en este asunto, que "ahora no paran de criticar cuando durante los 8 años de Gobierno Aznar no decían ni media palabra"
El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, José Molina, consideró hoy que el último trasvase de 114 hectómetros cúbicos aprobados por la Comisión Tajo-Segura, no es «prudente políticamente» aunque esté dentro de lo que contempla la ley, y advirtió de la caducidad del trasvase que, a su juicio, responde a una política del agua «desfasada».
En rueda de prensa, Molina criticó ese último trasvase –que tuvo un voto en contra del Gobierno regional– en un momento en el que existen demandas en las Fiscalías de Murcia y Madrid por el uso que se da al agua trasvasada, además de una demanda ante la Unión Europea por las sospechas que tiene el Gobierno regional sobre el uso y la intención del Ministerio de Medio Ambiente de realizar una auditoría interna en la Confederación Hidrográfica del Segura.
Agregó que, en estas circunstancias, realizar un nuevo trasvase «no es la medida política más acertada» y solicitó que los Presupuestos Generales del Estado para 2005 incluyan partidas en las que se vean las obras de conducción de agua a la llanura manchega, que garanticen la sustitución del bombeo de agua en Albacete y alrededores, y las que consigan que el río Tajo sea un río «y no un canal de aguas residuales de la Comunidad de Madrid».
El parlamentario socialista también criticó la «poca credibilidad» que está demostrando el Partido Popular en relación a este tema, y destacó que de los alrededor de 8.400 hectómetros cúbicos trasvasados en los 25 años de trasvase Tajo-Segura, casi la mitad, unos 4.100, lo han sido en los ocho años de gestión del PP.
En esos años, continuó, no se ha oído «ni una sola vez» al PP de Castilla-La Mancha decir «ni media palabra» a esos trasvases y no ha apoyado al Ejecutivo regional cuando ha reclamado. «Han tenido que esperar a que cambie el Gobierno para tener una actitud más radical», precisó.
«El PP se comporta como una franquicia»
Por otra parte, el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista aseguró que el Gobierno regional no está paralizado ni es un Ejecutivo seguidista, como indica el PP, sino que, por el contrario, ha desarrollado una «intensa actividad política» en apenas 60 días de gobierno.
En rueda de prensa para hacer balance del último periodo de sesiones, que finaliza mañana, Molina recordó los 30 millones de euros invertidos en materia sanitaria, los 25 millones de euros en centros educativos los más de seis millones en materia de empleo, o las 2.000 Viviendas de Protección Oficial que ha sacado a concurso el Ejecutivo castellano-manchego en los últimos meses.
Subrayó que el Gobierno de la Comunidad Autónoma está «consolidado y aceptado por la sociedad de Castilla-La Mancha con un gran nivel de ilusión y normalidad», y señaló que el presidente del Ejecutivo autónomo, José María Barreda, ha supuesto un nuevo impulso para la región derivado de los cambios que el triunfo del PSOE en las pasadas elecciones generales significaron para la región.
El parlamentario socialista, que se mostró satisfecho del intenso periodo de sesiones, rechazó la estrategia de confusión empleada por el Partido Popular en ese tiempo, en el que, a su juicio, los ´populares´ han demostrado «un gran nivel de desorientación política y falta de liderazgo» que justificó en el hecho de que, pendientes de quien va a nombrar Madrid como candidato regional, estén «comportándose como una franquicia».