Ramón Jáuregui califica de “frustrante” y de “diálogo de sordos” la reunión, por la negativa del PP a aceptar ninguna enmienda

• Explica que la reforma “no mejora el actual Estatuto, no responde a un consenso previo y no es constitucional”
Alejandro Alonso constata que Cospedal “está tomando decisiones al más puro estilo Romanones: hacer lo que le da la gana sin respeto a minorías ni a la ciudadanía”

Los representantes del Grupo Socialista en la Ponencia para la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha, Ramón Jáuregui y Alejandro Alonso, han denunciado esta tarde la actitud del PP en la reunión, en la que ya ha anunciado que no aceptará ni una de las enmiendas propuestas por el resto de grupos parlamentarios. Jáuregui ha calificado de “frustrante” de diálogo de sordos” la reunión, mientars que Alonso considera que se trata de “una tropelía, un atentado democrático desconocido hasta ahora”. La pretensión del PP es reducir hasta entre 25 y 35 los diputados en las Cortes regionales, frente a la vigente horquilla de 47 a 59 diputados.

Ramón Jáuregui ha explicado que la reforma estatutaria está “absolutamente falta de consenso”, lo que incumple “la primera y elemental exigencia de cualquier reforma estatutaria”. Además, ha señalado, “no se trata de una reforma para mejorar el autogobierno sino que es una reforma antiautonomista”, porque “jibariza el Parlamento castellano-manchego hasta extremos ridículos”. En tercer lugar, ha explicado el portavoz de Constitucional, no concuerda con la Constitución, porque vulnera los artículos referidos al pluralismo político y la participación activa de los ciudadanos”. En este sentido, ha recordado que el sistema de reducción de escaños “prácticamente impide que muchas fuerzas políticas puedan acceder a la Cámara”. Por ello, ha recordado que los socialistas llevarán la ley al Tribunal Constitucional cuando se apruebe.

Jáuregui ha advertido de que el PP “no puede ofrecernos consensos para las reformas democráticas cuando plantea al mismo tiempo una vulneración tan rotunda de la propia democracia, porque esta reforma “es profundamente antidemocrática”. “Quien quiera consensos tiene que empezar por practicarlos”, ha añadido.

Por su parte, Alejandro Alonso ha dicho que lo que pretenden los populares con esta reforma es “una barbaridad” y ha acusado a la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal de tomar decisiones “al más puro estilo Romanones”, es decir, “hacer lo que le da la gana sin respeto a minorías ni a la ciudadanía”. “Si finalmente el PP consuma esta tropelía”, ha continuado, “en una legislatura con una diferencia de un diputado más que la oposición va a aprobar reforma Estatuto y dos leyes electorales en la misma legislatura”. Por ello, ha constatado, “su único objetivo ganar las elecciones con una ley electoral hecha al interés exclusivo PP”.

El diputado ha afirmado que es “falso” que se pretenda una reducción gasto porque los diputados de Castilla-La Mancha no tienen sueldo”. “Pretende un pucherazo electoral, porque tiene miedo y nervios de saber que en condiciones democráticas normales va a perder las próximas elecciones”, ha explicado.