Los socialistas están presentando mociones de rechazo contra este Plan en Las Cortes Regionales, Diputaciones Provinciales y ayuntamientos de nuestra Comunidad Autónoma, para que "se oiga la voz de Castilla-La Mancha contra una iniciativa irresponsable y excluyente y que va a dificultar la paz y la convivencia en el País Vasco"

Desde el PSOE de Castilla-La Mancha se están impulsando distintas iniciativas contra la propuesta propugnada por el lehendakari vasco, Juan José Ibarrexte, sobre un «Estatuto Político para la Comunidad de Euskadi».

Estas iniciativas, que los socialistas también están llevando a cabo en el resto de la geografía nacional, se centran en la presentación de mociones en las Cortes Regionales, ayuntamientos y diputaciones de Castilla-La Mancha.

La Ejecutiva Regional del PSOE considera que el también conocido como «Plan Ibarrexte» supone una irresponsable propuesta «que conmueve nuestro orden constitucional y por lo tanto requiere una respuesta política que muestre bien a las claras el rechazo de todas las instituciones de la Región a un plan que es excluyente y que va a dificultar la paz y la convivencia en el País Vasco».

Para los socialistas, «no se puede consentir este ataque contra la Constitución y contra las reglas del juego democrático».

Medidas

Así, el Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha presentó ayer una iniciativa, ante el Registro de la Cámara, para que se celebre en pleno un debate general contra el «Plan Ibarrexte». Para el portavoz socialista en esta institución, José Molina, «nuestra intención es que se pueda presentar una resolución conjunta en la que se muestre el rechazo de las Cortes Regionales a este plan».

Por otra parte, los Grupos Socialistas de las cinco diputaciones provinciales de la Región y de un gran número de ayuntamientos de Castilla-La Mancha están presentando diferentes mociones en las que se muestra el rechazo al plan soberanista. En las mismas se señala que la aprobación de la iniciativa de Ibarrexte «supondría «la irreparable quiebra de la convivencia en la sociedad vasca». También se asegura que la sociedad vasca, mayoritariamente, no quiere cuestionar su pertenencia a España y a Europa, como plantea la propuesta del lehendakari, que, «además, no tiene encaje en el marco jurídico español ni en la futura Constitución Europea».

Por último, en las mociones se hace un llamamiento tanto al Gobierno vasco como al de España para que recuperen el diálogo institucional que permita seguir desarrollando el Estatuto de Autonomía,» diálogo que debe basarse en la lealtad constitucional y en la renuncia a planteamientos unilaterales de ruptura política e institucional».