El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha apostado este miércoles por la creación de un marco jurídico «más exigente y severo» que establezca los límites de la moralidad y de la ética en la gestión de lo público; en definitiva, «una ley que combata lo que todos queremos combatir, que es la corrupción».

Durante su intervención en el acto de entrega de los Honores y Distinciones con motivo del Día de la Ciudad, Emiliano García-Page ha realizado una reivindicación clara y rotunda del valor de lo público frente a las posiciones que desde diferentes ámbitos lo quieren cuestionar, ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.

El alcalde ha dicho que no debe confundirse «la mejor o peor valoración que tengan los ciudadanos de los gestores públicos con la importancia que tienen las instituciones públicas». Para evitarlo, y con las dudas actuales sobre la moralidad en la cosa pública, el alcalde se ha mostrado partidario de un ordenamiento jurídico que sea claro y exigente en la defensa de los intereses de los ciudadanos y en la lucha contra la corrupción.

Para García-Page, actos como los celebrados hoy y que reconoce la labor de entidades y personas en la defensa de Toledo, «son la máxima expresión del interés de lo público» y, por eso, la sociedad debe mantenerse unida para que no se ponga en cuestión todo lo que se ha conseguido en España.

ESTRATEGIAS DE FUTURO

Con esta convicción, durante los últimos años «Toledo no ha permanecido con los brazos cruzados y hoy sabemos muy bien hacia donde debemos soplar cuando cambie el viento», ha dicho el alcalde, quien ha asegurado que la ciudad tiene preparadas estrategias de futuro en ámbitos diferentes «porque la ciudad está creciendo», como lo confirman los datos sobre el incremento poblacional y el número de visitantes.

«Esto ocurre porque la ciudad de Toledo ofrece hoy certidumbres y en estos momentos de crisis política y moral, nuestra capital puede ser un faro para todos, una guía para el entendimiento y el ejemplo del trabajo común», ha destacado el alcalde.