El candidato socialista concluyó la undécima jornada electoral en Cuenca ante 3.000 personas

El presidente de Castilla-La Mancha y candidato a la reelección, José María Barreda, concluyó la undécima jornada electoral en Cuenca donde, ante 3.000 personas, fue recibido entre aplausos y gritos de «presidente, presidente». Barreda comenzó proclamando su fe en el futuro de Castilla-La Mancha, la región mejor comunicada de España, e ironizó ante la actitud de aquellos que, por ejemplo, pusieron en duda la llegada del AVE a Cuenca.

«Hubo muchas bromas y se descalificó el AVE por Cuenca», aseguró el presidente recordando las palabras de Aznar calificando de «tren botijo» este AVE que «aquí está a pesar de todo». También recordó las dudas de la alcaldesa de Valencia acerca de la inauguración de la estación del AVE en Cuenca en 2010, «pues ahí está», subrayó Barreda añadiendo que «mientras otros se dedican a tirar piedras sobre nuestro tejado nosotros trabajamos para mejorar».

A este respecto puso como ejemplo la reciente aprobación de una infraestructura que permitirá unir por AVE Cuenca no sólo con Albacete y el Levante español, sino también con la línea de Andalucía pasando por Ciudad Real, Puertollano, Córdoba, Sevilla y Málaga.

Lo importante de esta iniciativa es el aspecto turístico, tal y como señaló Barreda que recordó que, gracias a la Alta Velocidad, Cuenca recibirá muchos más visitantes. En este sentido reiteró la importancia de una industria limpia y deslocalizable como el turismo, y resaltó la gran cantidad de recursos con los que cuenta una provincia cuyo mejor exponente es la amabilidad y la honestidad de su gente.

Por todo ello, el candidato socialista aseguró que su confianza en esta región está basada en el conocimiento que tiene de sus paisanos, la energía más poderosa de la Comunidad Autónoma, la de los habitantes de una tierra que «ha construido un presente espléndido y que va a construir, con la energía de sus gentes, un futuro aún mejor».

Así, reiteró que hay que gobernar desde el conocimiento profundo y el contacto permanente con los ciudadanos. «Por eso no me cabe en la cabeza que alguien que quiera gobernarnos diga que va a dedicar dos o tres días a Castilla-La Mancha, porque no es suficiente», apuntó Barreda para quien esta tierra se merece una dedicación exclusiva y total y no que la consideren, como hace De Cospedal, que pretende seguir compatibilizando su cargo de secretaria general del PP, como un «plato de segunda».

El presidente achacó la actitud de la candidata del PP, que nunca está para apoyar a los castellano-manchegos en aquellos asuntos que, como el agua, son trascendentales para el desarrollo de la región, a su servidumbre con otras comunidades autónomas. «Todo el mundo se une en otras regiones en torno a determinados temas excepto De Cospedal, que de lo que más cobra es de su cargo como secretaria general», afirmó Barreda para quien la candidata «no quiere votar contra sus intereses», y estos, añadió «no coinciden con los de Castilla-La Mancha.

Casas Colgadas y no Colgantes

Ante la lejanía de De Cospedal, el presidente castellano-manchego ironizó acerca de la expresión que ésta utilizó llamando ‘Casas Colgantes’ a las Casas Colgadas de Cuenca, y bromeó parafraseando a José Luis Coll que cada vez que alguien cometía esta confusión decía que «las casas son colgadas, los mocos son colgantes».

Barreda se sinceró con sus paisanos asegurando que lo que verdaderamente importa ante las próximas elecciones es «qué va a pasar con la vida de los ciudadanos de Castilla-La Mancha, y subrayó que el 22 de mayo nos jugamos aspectos trascendentales para los castellano-manchegos como las plazas residenciales para mayores, la atención domiciliaria, o la teleasistencia.

En este sentido resaltó la importancia de la gestión de los ayuntamientos pues, insistió, «se nota cuando son sensibles a las políticas sociosanitarias», y recordó que en los comicios lo que se decide es el nombre de los alcaldes de los municipios de la región y quién presidirá Castilla-La Mancha.

El candidato socialista a la Presidencia autonómica reiteró que lo que se juega Castilla-La Mancha en las urnas es la continuidad o no de las políticas sociales, y puso como ejemplo del esfuerzo que está haciendo el Gobierno regional en este ámbito, el nuevo hospital de Cuenca que contará con la mejor tecnología y los mejores profesionales para atender todas las necesidades de los conquenses y de todos los castellano-manchegos.

El presidente comparó esta actitud constructiva con la del PP que, dijo, prefiere dedicar la campaña a difamar e injuriar con folletos frente a los que hay que hacer pedagogía política, convenciendo con argumentos y realidades. «Y por eso quiero explicar, añadió, que si resulto elegido el 22 las prioridades seguirán siendo la educación, los servicios sociales y la sanidad», sentenció.

Barreda afirmó que estas áreas ya son una prioridad absoluta para su Gobierno que dedica el 80 por ciento del presupuesto regional a unas políticas que son el resultado de una determinada manera de pensar y de ver la vida. «Por eso no da igual quien gobierne» señaló.

Compromiso profundo con sus paisanos

El jefe del Ejecutivo autónomo subrayó que lo que le mueve es el compromiso profundo con sus paisanos, e insistió que es por ello que no concibe otra forma de gobernar que no sea la de la cercanía, la proximidad con los ciudadanos. En este punto trasladó su gran preocupación por los que peor lo están pasando ante la actual crisis, los desempleados, y declaró que es momento de dar respuestas, estar con ellos a su lado y trabajar para buscar soluciones como el Pacto por Castilla-La Mancha, una iniciativa resultante del consenso, del acuerdo y del pacto.

También apostó por dinamizar la economía de la región pero siempre desde la unidad y el pacto social, y se preguntó cuál sería la situación actual si a la crisis económica añadiéramos la falta de prestaciones esenciales para los ciudadanos como es la sanidad, la educación o los servicios sociales.

En su opinión, la situación sería mucho peor por mucho que el PP asegure que tiene la fórmula mágica para acabar con el paro. «No existe esa varita mágica, y si la tuvieran ¿por qué no se la dan a Esperanza Aguirre o Valcárcel?», se preguntó Barreda para quien esta actitud responde a que la oposición no sabe cómo resolver una situación que requiere generar confianza en el territorio para atraer inversores y crear riqueza.

«No es casualidad que estemos en la región con más inversión extranjera en los dos últimos años», y eso es así, explicó, por el microclima de pacto y consenso logrado en la Comunidad Autónoma.

Finalmente, Barreda resaltó la importancia de los próximos comicios pues es el futuro de la región lo que está en juego, de ahí que solicitara a todos un esfuerzo de pedagogía para explicar el proyecto de los socialistas. Asimismo se dirigió a aquellos que tan mal lo están pasando debido a la difícil situación actual y les recordó que no se dejen llevar por un enfado y que hagan una valoración a largo plazo porque, insistió, nos jugamos cosas tan importantes como las prestaciones sociales o la gratuidad de la sanidad.

Apoyo de Barreda a Cuenca

Con un «bienvenido a la ciudad de las Casas Col-ga-das!!» el cabeza de lista al Parlamento autonómico, José Luis Martínez Guijarro, abrió el turno de intervenciones en el mitin en el que agradeció a Barreda todos los esfuerzos realizados en Cuenca y en la región.

Entre un numeroso listado de actuaciones, Martínez-Guijarro destacó la ejemplar aplicación de la Ley de Dependencia que se ha llevado a cabo en Castilla-La Mancha; el logro de que todas las capitales de provincia, Talavera (en breve) y Puertollano estén comunicados por AVE o la lucha en contra de la instalación de un Almacén Temporal de Residuos.

Del mismo modo el conquense aseguró que la sociedad de Castilla-La Mancha tiene esperanzas en sus reivindicaciones hídricas gracias a la gestión de Barreda que también ha sido ejemplar en educación, sanidad y bienestar social. «Gracias, dijo, por entre la bolsa y la vida, elegir la vida».

Martínez Guijarro no quiso finalizar su alocución sin antes recordar a toda la sociedad que el 22 de mayo Castilla-La Mancha se juega mucho porque «no da igual Barreda que Cospedal».

El candidato socialista a la Alcaldía de Cuenca, Juan Ávila, aseguró hoy que «mi equipo y yo estamos todo el día en las calles y oímos muchas cosas, como que el 22 de mayo alguna cosa va a cambiar y va a ser el alcalde de Cuenca, y que lo que no va a cambiar es el presidente de Castilla-La Mancha, que seguirá siendo José María Barreda». Por tanto, «después del día 22 de mayo yo te voy a seguir llamando presidente, pero lo haré siendo alcalde de esta ciudad».

Ávila ha valorado a los miembros de su equipo porque «Cuenca ha perdido cuatro años y cuando ganemos las elecciones tenemos que ponernos a gobernar, y para eso es necesaria la experiencia y la capacidad de gestión de los hombres y mujeres que me acompañan».

Del mismo modo argumentó que los ciudadanos van a seguir confiando en Barreda porque «tú eres la garantía de que sigamos teniendo un buen servicio de salud y sabemos de tu compromiso con la sanidad». En este sentido, ha manifestado que «se está haciendo un nuevo Hospital gracias a tu palabra y a tu compromiso. Si Pulido no hubiera estado mareando la perdiz, llevaríamos ya dos años construyendo el Hospital».

Ávila señaló también que «lo más importante va a ser la creación de empleo. Vamos a apostar por los empleos verdes y por los centros de investigación y de empresas para tener desarrollo industrial». Y dirigiéndose a Barreda indicó que «para eso te necesito yo y te necesita Cuenca; y también para de una vez por todas sacar las vías del tren convencional del centro de la ciudad y hacer ahí la Cuenca del siglo XXI».

Por último el candidato a la Alcaldía apuntó que para José María Barreda, lo más importante es Castilla-La Mancha y cuando se trata de defender los intereses de Castilla-La Mancha se reconoce alumno suyo, «porque para mí la defensa de los intereses de Cuenca es prioritaria y no me voy a amedrentar ante nadie».

Inversiones en Cuenca

Desde 2007 el Gobierno de Castilla-La Mancha ha invertido en Cuenca 1.600 millones de euros en la ciudad. Consiguiendo hacer una ciudad comunicada con el mundo, por alta velocidad, la velocidad que necesita la industria, el comercio y el turismo, la cultura y la artesanía.

Cuenca es además una ciudad universitaria que crece en titulaciones, como Periodismo, en alumnos, en prestigio y en oportunidades. Cuenca crece en servicios públicos, y dentro de poco tendrá un hospital general universitario moderno y avanzado, como nunca antes en toda su historia.